Por Redacción - 11 Noviembre 2019
La última década ha marcado la evolución del Black Friday en España. La jornada comercial pasó de ser un día de compras que los españoles solo veían en las películas y en las series estadounidense a convertirse en una de las piezas clave de la campaña de Navidad, en la que se registran importantes cifras de gasto y en las que se adelantan ya algunos de las compras clave asociadas a los regalos navideños.
El trabajo de las grandes mutinacionales, como Apple y Amazon, fue clave para incorporar la jornada al calendario comercial. Ellos fueron los primeros en celebrarla, haciendo que se rompiera la barrera de entrada de algo nuevo. Desde ahí acabó popularizándose a todas las empresas y llegando a todas las estrategias, pymes incluidas.
De hecho, las previsiones para el próximo Black Friday, que se celebrará en el último viernes del mes de noviembre, son muy optimistas. La jornada se ha convertido ya en una excusa para una semana de consumo, como señalaban en las conclusiones del reciente Informe Black Friday 2019, elaborado por Webloyalty.
Según sus estimaciones, las compras durante la que llaman la Black Week son un 151% superiores a las que se registran en la semana anterior. Sus estimaciones apuntan a que los españoles gastarán, de media, 240 euros durante esa semana, 80 en el Ciberlunes y 160 directamente en el Black Friday.
Turismo, moda y tecnología son los sectores que se llevan una parte más importante del gasto. No es una cuestión sorprendente, si se tiene en cuenta que la tendencia de los consumidores es la de reservar para esos días aquellas compras destacadas de productos de costes elevados que les interesan. "Los consumidores aprovechan estas fechas con descuentos para anticipar las compras navideñas de importes medios-altos, es decir, son compras meditadas previamente por lo que se deja poco margen a la improvisación, sobre todo, en lo referente a dispositivos tecnológicos o viajes", afirmaba al hilo del estudio Paula Rodríguez, business development director de Webloyalty.
Este no es el único estudio que apunta que el interés de los consumidores por la jornada está aumentando. También lo apuntan desde Finder, quienes apuntan que "se espera que el Black Friday sea más grande que nunca" este año. "El interés de búsqueda del Black Friday aumentó un 22% respecto al año pasado y un 300% desde 2015", señalaba su portavoz, Susannah Binsted, en una nota de prensa.
Según sus estimaciones, un tercio de los adultos españoles planea comprar algo durante el Black Friday. Menos conservadora es la estadística de Tiendeo: según sus datos, el 90% de los consumidores prevé comprar algo y 4 de 10 reconoce que acabará haciendo compras compulsivas. El gasto medio para ellos estará en los 205 euros por persona.
Los datos de Google sobre el mercado español también apuntan a un gasto que supera los 200 euros. Según ellos, la media está en los 256 euros, con una subida del 8% interanual y un crecimiento del 220% en las ventas frente a las "semanas normales". Las ventas totales que el Black Friday genera en España están ya en los 1.600 millones de euros, según sus estimaciones.
La pasión por hacerse por una gran oferta se nota ya en cómo los consumidores aceptan algunas incidencias. Un 26% de los compradores está incluso dispuesto a hacer cola durante la noche si con eso logra las ofertas más destacadas, volviendo a los datos de Finder.
Si algo parecen tener claro los analistas, es que las marcas y las empresas necesitan una estrategia omnicanal para lograr posicionarse de la mejor manera posible de cara al Black Friday.
Las compras del Black Friday están muy vinculadas a las compras en tiendas físicas, posiblemente porque los consumidores asocian la jornada a la emoción de la compra inmediata y la recompensa a corto plazo. Como explican desde Tiendeo, un 45% de los españoles directamente prefiere comprar en tiendas físicas, lo que implica necesariamente que la jornada sea solo algo a gestionar en retail. En realidad, para sacar el mayor beneficio posible y el retorno más elevado, hay que posicionarse con una estrategia omnicanal.
Los datos de Google también dejan claro que los consumidores acuden a tiendas físicas a hacer sus compras, pero que también emplean las plataformas digitales. El crecimiento de las búsquedas "cerca de mí" aumentaron en un 200% en los últimos dos años y el 62% de las ventas que registraron las tiendas físicas lo hicieron influenciadas por algo que el consumidor recibió en el canal digital.
De hecho, según las cifras del gigante, el impacto de las búsquedas en las compras físicas es elevado y rápido. El 76% de los consumidores que buscaron algo local se acercó a la tienda en menos de un día.
En general, y ya según datos de Tiendeo, 8 de cada 10 españoles se preparará antes de salir a comprar investigando lo que le interesa y las ofertas. El 80% de esos consumidores hará esa investigación en la red.