A la mayoría de empresas, les ha pillado por sorpresa lo que hace unos años se llamaba el “Marketing del Futuro”. Unos hablaban de tendencia, otros de moda y otros más realistas, hablaban de una auténtica revolución. Hoy por hoy, hablamos de un cambio tecnológico, pero no solo en cuanto a tecnología se refiere, sino un cambio mucho más de fondo, un cambio en la mente y en la percepción de los usuarios. Estos cansados de los medios convencionales, han visto en las redes sociales, un medio dónde poder desmontar las estrategias que crear las empresas. Ya no vende más, el que más publicidad realiza, ni el que se encuentra en mejor posición en el lineal. Ahora vende, el que conecta, el que hace las cosas de una manera diferente y sobre todo, vende el que el consumidor quiere. Este concepto es difícil de asimilar, sobre todo para los grandes ejecutivos que vienen de una comunicación antigua, en la que su empresa y su producto mandaban. En los últimos años han visto, que hablar de ellos constantemente, no interesaba al consumidor, que ver siempre su ombligo, no era atractivo para los posibles clientes. ¿Por qué ha ocurrido esto? ¿No les interesa mi producto? ¿No les intereso yo, o es mi actitud? Quizás cuentes con un producto bueno, pero quizás tu producto o tu marca no conecta con el nuevo consumidor. ¡Sí, señores ejecutivos, su consumidor ha cambiado! El consumidor, ha madurado, se ha hecho exigente y se ha cansado de vivir como lo hacía antes. Quiere nuevas experiencias, emociones, quiere vivir y sentir, quiere disfrutar incluso en el momento de la compra. La comunicación juega un papel clave en la vida de una empresa o producto, ya que es el consumidor quien nos tiene en sus manos. Puedes seguir hablando de ti, pero siempre de una manera más original, habla sobre contenido que le interese, que le aporte, que le llene. Recuerda que debes de aportarle valor y aunque no hables directamente de ti, él sabrá que eres tú y no olvidará tu interés por sus gustos y aficiones. Hoy por hoy, las empresas que han asimilado esto son las empresas que están triunfando, que se relacionan con sus clientes, adaptándose a los nuevos tiempos, creando ese vínculo emocional del que tanto estamos leyendo últimamente. Las personas nos movemos por emociones, a pesar de tener nuestra parte racional, somos muy emocionales. Llegar al corazón de las personas, se ha convertido en el objetivo fundamental del Marketing, apelar a los sentimientos y a las emociones. Deja huella y jamás te olvidarán.