Atendiendo a los datos de Nielsen, el 90% de los consumidores confía en las recomendaciones de la gente que conoce; seguro que también es tu caso, valoras especialmente la opinión de la gente de tu entorno que ya conoce un producto, o tiene contratado el mismo servicio que tú necesitas. Esta práctica también se traslada al medio online, donde, según publicó Wired Magazine en el Reino Unido, el 90% de las compras están influenciadas por el Social Media, además, el 67% de los consumidores online gastan más después de haber recibido una recomendación (baazarvoice.com). El denominado comercio social no ha hecho más que empezar, está previsto que en 2015 el comercio social reporte a las empresas un beneficio de 30 billones de dólares, así lo ha hecho saber Booz & Company. Con el fin de aprovechar la situación al máximo, las empresas han de emplearse a fondo para conseguir prescriptores, que le reporten el mayor número de esas valiosas opiniones favorables. ¿Por qué se producen las recomendaciones? En primer lugar, porque el ser humano es eminentemente social, le gusta estar en contacto con los demás y compartir. Los principales motivos que llevan a un prescriptor a recomendar una marca son, según el estudio llevado a cabo por la agencia de Social Media Zuberance, el haber tenido una experiencia positiva con la marca, el producto o servicio (50%). Un tercio de los prescriptores comparte sus experiencias positivas para ayudar a otros a tomar una decisión adecuada, mientras que curiosamente solo el 1% lo hace bajo una contraprestación económica o bajo la promesa de un regalo ¿Cómo ganar prescriptores para una marca? Para conseguir adeptos fieles a la marca, lo principal es contar con una buena reputación online, cultivada a base de esfuerzo y dedicación, con una adecuada estrategia en Social Media. Es importante generar contenido relevante que aporte notoriedad online, que la marca transmita valores positivos y desprenda confianza. Una vez que la empresa tenga una trayectoria intachable, estará en disposición de crear una comunidad sólida y atraer a futuros prescriptores para que que obren en su favor. Los pasos a seguir son:
¿Cómo son los prescriptores de tu marca? ¿qué relación tienes con ellos?