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Ante el boom actual del marketing de contenidos como pieza clave para atraer clientes/usuarios, se hace fundamental saber reconocer el talento allí donde lo hay.
El marketing de contenidos ha demostrado con creces su valor a la hora de aportar beneficios a la estrategia global de marketing, por ello, no es una disciplina que deba tomarse a la ligera. Para que un contenido tenga la posibilidad de triunfar se tienen que dar una serie de requisitos, aunque no siempre juntos:calidad,novedad,originalidadyutilidad. Y para conseguir esto hace falta una doble inversión, tanto monetaria como en talento.
Es importante por ello el poner de manifiesto la necesidad de invertir en talento para asegurar el éxito de nuestra campaña de marketing de contenidos.
Cuando decidimos lanzarnos a la producción de contenidos para potenciar nuestro negocio, debemos establecer claramente una línea editorial que sirva para asegurar el éxito de nuestra estrategia. Esta línea editorial marcará una serie de hitos que deberán ser fijados antes de comenzar cualquier tipo de producción:
Una vez establecidos estos puntos, ya podemos comenzar a planificar la elaboración de contenidos, siempre acorde al calendario editorial.
Y es aquí donde llega el momento de saber reconocer el talento y utilizarlo en beneficio de nuestra estrategia.
Artículos
Escribir no es fácil. Requiere tiempo, inspiración, orden y, muy importante, corrección. Por esta razón, no es tan sencillo lanzarse a escribir artículos. Muchos de los que lo hacen por primera vez se encuentran con la fatídica situación del "miedo a la hoja en blanco".
Pero no solo se trata de comenzar a redactar, sino de cómo hacerlo. Hay que reconocer el estilo requerido por la web, un estilo que capte la atención de los usuarios, que desde el primer momento les provoque querer leer más y que cuando terminen digan: "¡Qué buen artículo! Ha merecido la pena".
Cuando de escribir se trata, debemos encontrar a alguien que posea facilidad para la redacción, que tenga capacidad de concisión y, sobre todo, que sepa crear una voz de marca que sea única y original. ¿A que ya no parece tan fácil?
El talento para la escritura juega aquí un papel fundamental. Es por eso que si pensamos contratar a alguien que elabore nuestros artículos, ya sea en plantilla o externo, esta persona debería poder aportarnos referencias a trabajos anteriores para que nos de la posibilidad de valorar su idoneidad. Es nuestra obligación exigir un portfolio de artículos publicados.
Infografías
Una infografía requiere una serie de características para que sea efectiva: atractivo visual, valor informativo, dimensiones adecuadas, etc. De nuevo, el talento para elaborarlas vuelve a ser clave.
No es lo mismo hacer una simple infografía que diseñar una pieza de contenido extraordinaria. No es lo mismo un simple diseñador que un artista del diseño.
El encargado de realizar la infografía debe ser capaz de sintetizar la información que se le aporta y representarla de la manera más atractiva posible para que los usuarios sientan que están ante un contenido que aporta valor y que merece la pena compartir con los demás.
Vídeos
Cualquiera de nosotros puede hacer un vídeo; tan solo hay que sacar el móvil y comenzar a grabar. Pero entre eso y un vídeo corporativo sobre un producto, un vídeo explicativo sobre alguna funcionalidad o un vídeo instructivo sobre... lo que sea, hay una gran diferencia.
La persona encargada de producir y realizar el vídeo debe saber manejar conceptos como duración óptima, iluminación, calidad de sonido, etc. O en el caso de ser un vídeo animado, poseer además la maestría de diseñar ilustraciones de calidad.
En definitiva, si queremos que nuestros contenidos sean piezas que los usuariosamende verdad, debemos poner todo nuestro empeño en que poseancalidad,novedad,originalidadyutilidad. Y para ello debemos buscar a los profesionales que mejor sepan desarrollar nuestros proyectos. No se trata de tener un título (olvidémonos de la titulitis), sino de poseerel talento de saber hacer bien las cosas.
