Por Redacción - 13 Septiembre 2013
YouTube es una gran plataforma para generar notoriedad online. Seguro que te viene a la mente algún caso de vídeo que, inexplicablemente, de la noche a la mañana ha cosechado miles de visitas y circula por toda la red. ¿Te imaginas que eso te pudiera pasar a ti?
Nada es imposible, pero conviene no hacer castillos en el aire, y ser conscientes de la realidad. El éxito en Youtube no es algo que pueda predecirse. Ni siquiera contando con todos los recursos del mundo. En ocasiones, las ideas sencillas, lo "cutre" e incluso lo absurdo puede terminar convirtiéndose en uno de los virales con más visionados.
La empresa Unruly nos ofrecía datos relacionados tras examinar varios elementos interesantes sobre los vídeos corporativosdetallando algunas claves como el mejor día para lanzar una campaña y los factores creativos que más pueden contribuir a que un vídeo se convierta en viral. En este sentido, el trabajo de Unrulyseñalaba toda una serie de respuestas psicológicas a los vídeos (tales como felicidad, sorpresa, desprecio y enfado, así como motivaciones sociales que justifican su distribución, destacando que los vídeos necesitan de una “fuerte respuesta del espectador” para alcanzar ciertos níveles de éxito. Sin embargo, para muchas empresas estos conceptos son completamente desconocidos.
La moda de los virales y el auge de los videos online, han provocado que muchas empresas comiencen a apostar por el desarrollo de contenidos bajo este formato. Los vídeos online se han convertido en el arma más poderosa para las marcas. Los contenidos realizados sobre vídeos online, aumentan la confianza y refuerzan la intención de compra. Es un modo muy atractivo de consumir información. Uno de cada tres clientes ve vídeos en la página del producto, o donde los encuentra, mientras busca información sobre el producto que le interesa. Sin embargo, al margen del fenómeno de los grandes virales, muchas empresas terminan por comprobar que sus esfuerzos no merecen la pena, o que sus vídeos no generan el impacto deseado. ¿Por qué?
Estos son algunos de los principales problemas a los que se enfrentan las empresas a la hora de hacerse un hueco en el estrellato del canal de los vídeos online.
No tienen un objetivo claramente definido. ¿Sabes lo que quieres conseguir exactamente? ¿tráfico para tu web? ¿ventas? ¿promocionar tu producto? ¿suscriptores a tu canal de vídeo? Si no marcas una meta concreta, tu mensaje no estará orientado a nada en concreto, por lo que no conseguirá captar la atención como debería.
No disponen de los recursos necesarios. Tu presupuesto difícilmente alcanza para contar con un plan de comunicación básico, por tanto no puedes tener mayores pretensiones. Llevar a cabo una estrategia de vídeo online requiere de muchos más recursos que mantener actualizado un perfil de Facebook.
No son constantes. Si quieres mantener la atención de tus seguidores, y conseguir hacerte un hueco en este entorno mediático, debes desarrollar cierta presencia. Esto se consigue con publicaciones frecuentes, siempre con un alto nivel de calidad y temáticas relacionadas con los intereses del público. De este modo además tu canal ganará en relevancia para los buscadores, e hiráis haciéndote un hueco en tu sector.
A los vídeos les falta chispa. Llámalo creatividad, talento o "gracia". Si el vídeo no consigue enganchar al receptor, éste directamente lo cerrará. La clave para que un vídeo consiga gran repercusión es que sea lo suficientemente bueno, original, o útil para que cree en el destinatario la necesidad de compartirlo. Así se sientan las bases de un vídeo viral.
No cuentan con los medios adecuados. Una cosa es que no hagas una superproducción de Hollywood, y otra que no cuides los aspectos básicos que ha de tener el vídeo. Para hacer vídeos online de cierta calidad conviene invertir en recursos técnicos, artísticos y profesionales. El sonido, la iluminación o el escenario donde se lleve a cabo la grabación son determinantes. De otro lado, los actores deben tener presencia y quedar bien en cámara. Es muy recurrente utilizar al personal de la empresa para explicar en qué consiste un producto, o el lado más humano de la compañía, pero hay que saber elegir bien a los participantes. Tiene que ser gente que transmita, que sepa expresarse y sea capaz de comunicar.
No están optimizados ni tienen difusión. Por muy bueno que sea el vídeo, con el simple hecho de colgarlo en YouTube no es suficiente para atraer al público objetivo. Retomando el concepto de estrategia, cuida el título de tus vídeos y su descripción. Insertálos en tu web y difúndelos a través de los perfiles sociales de tu empresa. Toda acción es poca para conseguir la mayor relevancia.
Como ves, el camino de la fama tampoco es fácil en YouTube. Por tanto, plantéate bien la idoneidad de apostar por este medio, y la estrategia a seguir.