El marketing de contenidos es una valiosa técnica para atraer clientes, aumentar la notoriedad de al marca, generar confianza, o conseguir leads de un modo no intrusivo. De ahí que las empresas cada vez apuesten más por él dentro de su estrategia de marketing.
El 90% de las empresas practica el marketing de contenidos, un área a la cual destinan el 25% de su presupuesto. Además, aproximadamente el 80% considera que es el futuro de marketing, y debería ser ya una parte central de la estrategia de toda empresa.
Entre sus ventajas destaca su capacidad para:
Llegados a este punto cabe preguntarse ¿Cómo diseñar una estrategia de contenidos efectiva?
En primer lugar, conviene estudiar a fondo al público objetivo, con el fin de conocer sus preferencias e intereses. De este modo además será posible averiguar en qué plataformas sociales se mueven qué tipo de contenido comparten o cómo interactúan en estos medios.
De otro lado, es preciso averiguar las palabras clave más populares, relacionadas con la actividad o empresa, así como qué tipo de contenido es el que mejor funciona. Para ello puede resultar muy útil estudiar a la competencia, ver qué tipo de contenido es el más popular y cómo se podría mejorar.
A partir de aquí, realizamos un análisis interno y revisamos los recursos a nuestra disposición. Es importante aprovechar el potencial de la empresa, tanto por razones económicas, como porque aquí puede residir nuestro principal valor diferencial. En nuestra filosofía de empresa, habilidades de nuestros empleados y expertos o en el caso de los expertos o proyectos innovadores que se estén realizando podemos encontrar interesantes aspectos a explotar en la estrategia de contenidos.
También podemos implicar a influencers y expertos en la materia, haciéndoles partícipes de nuestras propuestas. Ellos ayudarán a dar forma a las ideas, y plantearlas bajo el punto de vista más útil para el público objetivo y, por tanto, con mayor probabilidad de ser efectivo.
Es importante tener en cuenta todas las posibilidades antes de lanzarse a generar contenido. Éste no tiene por qué estar en modo texto, sino que puede transformarse en infografía, convertirse en vídeo o podcast. Dependerá de los recursos, el mensaje a transmitir y el objetivo de la estrategia.
Una vez creado el contenido ¿Qué acciones es preciso realizar para maximizar los resultados?
Para garantizar un mayor alcance, es necesario hacer que el mensaje se difunda a través del mayor número de canales posible. De ahí que, en primera instancia, el contenido se muestre perfectamente a través de todos los dispositivos, y se faciliten las herramientas para ser compartido. En ocasiones no tenemos en cuenta algo tan sencillo como los botones sociales.
Definitivamente, el marketing de contenidos abre una vía de contacto con el público objetivo totalmente distinta a las acciones de comunicación y técnicas de marketing tradicionales. Sus posibilidades son infinitas, y permiten lograr objetivos que de otro modo sería muy difícil, como es el caso de generar confianza y un acercamiento directo con el público objetivo.