Todos sabemos que Internet es una fuente inagotable de información. Según el informe IBM Business Analytics and Optimization for the Intelligent Enterprise estamos creando 2,5 trillones de bytes de datos cada día; para tener una idea más concreta de lo que representa, podríamos decir que si cada byte representase una estrella del firmamento, necesitaríamos 6 vías lácteas para tenerlos todos. Los usuarios, tanto particulares como empresas, alimentan continuamente este monstruo generando datos sin parar. Según el Observatorio de Redes Sociales, un 91% de la población internauta española tiene cuentas de redes sociales activas. Cuando uno crea una página web, participa en un blog, comenta imágenes en redes sociales, manda un tweet o surfea por la red, está generando datos y estos tienen un gran valor para las empresas. Como todos sabemos, la información es poder.
Sin embargo el acceso a esta información no es tan fácil, no sólo por la cantidad, sino por la calidad de ésta. El acceso a estos datos y la capacidad de relacionarlos y analizarlos es lo que realmente les dan valor. Desde el punto de vista empresarial, los medios sociales son una de las fuentes online más interesantes, pero también más prolífica. Facebook (por citar una de las más famosas) anunció en octubre de 2012 que alcanzó los 1.000 millones de usuarios y que había subido a sus servidores 219.000 millones de fotos. Es imposible para un ser humano asimilar tanta información, sin embargo es posible optimizar la digestión de una parte de ella. Recordamos que en torno al90% de la información transmitida en el cerebro humano es visual; ¿podría ser la visualización de datos una solución a la saturación de información?
La saturación de información es una realidad en el presente, pero no parece que se vaya a solucionar en el futuro inmediato. Según el informe Digital Universe de IDC, la cantidad de datos que vamos a producir entre hoy y 2020 se duplicará cada dos años.
El valor de los datos para las empresas
Con el auge de la web 2.0 y de las interacciones en la red aparecieron compañías especializadas en la medición de los datos generados en los medios sociales, el número de seguidores, de comentarios, de tweets, de “me gusta”, etc. Las empresas de cualquier sector pueden tener acceso a la información a través de la interacción con sus públicos objetivos, ya sea a través de sus propios canales, de los de sus competidores, partners o compañías que complementan su mercado. De esta forma pueden conocer sus necesidades y así desarrollar y aumentar su capacidad de negocio.
Las empresas utilizan estos datos para elaborar una estrategia general en los medios sociales. Son datos que proporcionan indicadores y parámetros de rendimientos para establecer si la estrategia elegida es correcta o debe corregirse. A su vez les proporcionan claves para lograr más compromiso por parte de sus seguidores y generar más valor de marca. Para el sector de las agencias en concreto, los servicios de Unmetric resultan ser también una plataforma de validación para mostrar a sus clientes los resultados de sus acciones en las redes sociales.
¿Quién puede asimilar tanta información?
Según el informe de IBM, previamente citado, se calcula que el 90% de todos los datos que existen en la actualidad se han generado en los dos últimos años. Para analizar grandes cantidades de datos se usan técnicas de Big Data, aunque el usuario medio de Internet frente a esta montaña de información solo puede asimilar una pequeña cantidad de inputs.
Nuestra capacidad de retención de información es bastante limitada, de ahí los 140 caracteres como máximo de Twitter o los populares vídeos virales de 30 segundos en Youtube. La forma de presentar estos datos de forma breve y concisa es la piedra angular para conseguir el objetivo principal que no es otro que el consumo masivo de esta información. Si la oferta es mucho más grande que la demanda hay que buscar la forma de destacar en la comunicación visual. Sólo obteniendo una calidad de datos óptima e integrando fácilmente estos datos por parte de los usuarios se puede realmente alcanzar este objetivo.
La infografía, el arma perfecta de la comunicación visual
La infografía es la manera más eficaz para comunicar datos en forma de gráficos e ilustraciones visualmente atractivos que retienen la atención de los espectadores. Este tipo de comunicación visual permite al público “escanear” un mensaje e integrar los datos o la noticia rápidamente y con poco esfuerzo.
La calidad gráfica tiene que ser exhaustiva, es decir ir más allá que el diseño. Un comunicador visual es un perfil especialmente polivalente y se necesita la calidades de un periodista, analista, y obviamente, un diseñador gráfico. De hecho, según Unmetric, la mejor forma de lograr un resultado óptimo para transmitir un mensaje de esa manera, es contar con un profesional altamente cualificado manejando y visualizando datos. La multinacional teme que la comunicación visual se convierte en una tendencia que desembocaría en una mercantilización de los servicios de infografía, porque, aunque si desde el aspecto técnico y de diseño el resultado es atractivo, la transmisión de los mensajes no puede limitarse a estos parámetros como el comunicador visual tampoco se limita a un perfil profesional.