La simpleza no es algo que reine en el mundo de los negocios, tampoco lo iba a ser en el planeta del marketing y qué menos en el universo inbound. Tenemos cifras, pero la conclusión derivada de tales investigaciones desvela sorprendentemente que no existe un día o una hora específica como regla general sino que la misma dependerá en cierta medida de múltiples factores a tener en cuenta. Así se cierra el debate sobre temporalidad y frecuencia como algo independiente y con capacidad de ser tratado de manera aislada.
Más que una cuestión de tiempos y frecuencias es un tema de sincronización. Hacer que coincidan el email y nuestro potencial consumidor en el mismo momento y en el mismo lugar. La base está en crear la oportunidad de encuentro e impacto positivo. Lo cual convierte en mucho más necesaria la atención que prestamos al consumidor antes que focalizar todos nuestros esfuerzos en el email, su inmediatez, o el tiempo más idóneo. Eso es un alterar de prioridades. En definitiva, una distorsión de las partes dónde el medio pasa a ser protagonista.
¿Cómo esperamos ser efectivos en la sincronización entre el email y el consumidor sino estamos prestando ninguna atención a este último?
Desviándonos del e-mailing y enfocándonos en un plano más general. Confucio sabiamente dijo "Entristécete no porque los hombres no te conozcan, sino porque tú no conoces a los hombres". Las empresas siguen entristeciéndose porque el mercado no conoce sus productos, y los ánimos bajan al observar un producto pasar desapercibido ante los ojos del consumidor. En ese caso parece ser que la tendencia prioritaria es una revisión del producto en vez de un examen interno sobre la profundidad del conocimiento que se tiene del público.Un alarmante44% es el que corresponde a la cifra de profesionales quededican tiempo a crear estrategias de Content Marketing, menor es la que cierne a la investigación y focalización en el conocimiento del público.Reiteradamente se cae enuna sobre-atención al producto o servicio cuando la esencia del mundo on-line estála interactividad y las relaciones interpersonales.
Razones por la que se tiende a sobre-analizar el producto o servicio:
El comprador medio en el 2011 empleaba 10,4 fuentes de información para hacer efectiva una compra. Esta cifra supone un incremento de casi el doble dado que un año antes estaba situada en 5,3 fuentes de información. Estas observaciones se traducen a que la inmediatez con la que se tomaban decisiones en la red está sufriendo una desaceleración a medida que pasa el tiempo, provocando que el conocimiento del consumidor, así como, la atención a los contenidos y a la información sigan siendo un factor decisivo a la hora de cerrar una venta. Por lo tanto, una razón más para centrar la atención en el entendimiento del nuestro público objetivo, en el desarrollo de un plan estratégico de Content Marketing, y por consiguiente, estar listos para desempeñar campañas exitosas de E-mailing.
En definitiva más psicología cognitiva; comprender, analizar y estudiar el círculo de compra de nuestro consumidor actual y potencial. Sólo así podremos crear contenido de calidad y aprovechar las virtudes reales del Content Marketing.