Por Redacción - 11 Septiembre 2015
Que el contenido es ahora el rey lo sabemos todos. Justamente por eso tantas empresas están volcando sus esfuerzos en crear un marketing de contenidos potente y de calidad; el resultado es que hay tanto material, que a veces parece imposible destacar, y sobre todo, hacer que el consumidor se implique.
Porque aunque la esperanza de todo responsable de marketing es que sus contenidos sean virales y se compartan a la velocidad del rayo, un estudio de Moz y BuzzSumo (analizando una muestra de 100.000 posts corporativos) descubrió que más de la mitad de los artículos tenían 2 o menos interacciones en Facebook (ya fuera comentarios, "me gusta" o haber sido compartidos) y que el 75% no había sido referenciado ni "linkeado" desde ninguna fuente externa.
Las razones son varias, aunque una de las principales es la falta de calidad en los posts. Las faltas de ortografía y gramática son relativamente frecuentes, como vimos recientemente en un informe de Acrolinx, así como los contenidos que no cuidan el aspecto visual. Además. muchas marcas no promocionan correctamente sus propios contenidos (a través de los medios y redes sociales, email marketing o influencers) y el 93% solo se esfuerza por compartir los contenidos nuevos, en lugar de aprovechar también los que ya han sido creados en el pasado.
Pero también hay una correlación entre el tipo de contenidos que se crean y su éxito en redes sociales: hay formatos que los usuarios son más proclives a compartir, y otros que son más tendentes a ignorar. Y entre los ganadores están sin duda, los vídeos y las listas. De los posts analizados, los primeros habían sido compartidos una media de 17708 veces, y las listas, 10734. Podemos compararlo con los contenidos menos populares, como infografías, que se comparten una media de 268 veces.
Otro factor analizado fue la longitud de los textos y los datos son concluyentes: cuantos más largos, profundos y elaborados son los artículos, más se comparten y mas links o menciones externas reciben.
Así, los artículos de menos de 1000 palabras se comparten una media de 2823 veces, los de entre 1000 y 3000 palabras, 3855 veces y los que superan esa extensión 5883 veces. Frente a lo que podamos pensar, los usuarios no quieren textos rápidos y sencillos, al menos, no para compartirlos.
Lo curioso es que a pesar de que los contenidos largos tienen mayor viralidad y engagement, el 85% de los posts analizados tenían menos de 1000 palabras.
¿Qué es lo que lleva a alguien a compartir un contenido en las redes sociales?
Si queremos crear contenidos con los que los usuarios interaccionen, una pregunta lógica que surge es cuáles son las motivaciones que les llevan a hacerlo.
Un estudio de Frctl indagó en cuáles eran las emociones y necesidades que provocaban un mayor número de "shares" y descubrió que la principal razón para compartir algo en las redes sociales es la voluntad de entretener, como respondieron el 44% de los encuestados. Después, venía el deseo de educar o enseñar algo (25%), reflejar la propia personalidad (20%) o mostrar el apoyo a alguna causa (10%).
Teniendo en cuenta la saturación de contenidos en Internet, a la hora de crear un post susceptible de ser compartido masivamente hay que centrarse en ofrecer información exclusiva, que sea de valor para el usuario y que sea, además, visualmente atractiva. Y sobre todo, que no esté orientada a vender ni a obtener el mayor ROI posible.