Por Redacción - 27 Junio 2013
No importa lo cuidadosos que seamos en el diseño e implementación de una campaña de email, pero siempre habrá mensajes que terminarán siendo dirigidos a una carpeta de spam en el correo de nuestro destinatario.
La empresa Return Path ha analizado cómo de frecuente los usuarios “rescatan” esos correos de sus buzones y por qué. Pocos actos de un consumidor o un usuario muestran su grado de lealtad hacia una marca o empresa que el voluntario “rescate” de uno de ellos.
La mayoría de los programas gestores de correo permiten a los usuarios poder examinar el contenido de sus buzones de correo basura antes de borrar su contenido, y también ofrecen la capacidad de “recuperar” esos correos que, inadvertidamente, puedan haber acabado allí.
No es de extrañar que los investigadores establezcan relaciones entre ese rescate y la fortaleza de la marca que está detrás. Según George Bilbrey, presidente de Return Path, “Virtualmente todos y cada uno de los remitentes ven sus mensajes acabando en la carpeta de spam, pero sólo unos pocos consiguen que los destinatarios se animen a buscarlos”.
Return Path ha analizado cuántos correos electrónicos han sido rescatados, calculando lo que se conoce como ratio TINS (This is not spam), o porcentaje de cuántos mensajes son rescatados por el usuario. Así, dentro de un colectivo analizado de más de 1 millardo de mensajes que en el primer trimestre del año acabaron en el buzón de spam, menos del 2‰ (0,17%) merecieron el favor del destinatario.
Pero no todas las marcas consiguen la misma gracia del consumidor. Según Return Path, dentro de las compañías con mejor ratio de TINS se encuentran Apple, Amazon Etsy, Match.com, Netflix y United Airlines, entre otras.
“Los remitentes con mejores ratio de TINS comparten características comunes que van más allá de las buenas prácticas en el email marketing”, dijo Bilbrey. “Utilizan inteligencia basada en datos para conectar con los consumidores y estudiar su conducta, tomando decisiones que ayudan a mejorar su lealtad en todos los canales”.
“Los ratios TINS se relacionan con altos niveles de engagement”, señala Bilbrey. “Un mayor porcentaje de mensajes leídos significa que hay mayores posibilidades de que los mensajes que acaban en el spam puedan ser recuperados”, sigue diciendo.
De las empresas estudiadas, los remitentes con ratio de lectura de menos de 9% suelen tener un ratio TINS de 0,14%, mientras que aquellos con ratio de lectura de 22% o mayor, consiguen un ratio TINS de 0,97%, seis veces superior. Porcentajes de reenvío sugieren escenarios parecidos. Aquellos con ratio TINS de 0,5% tienen hasta seis veces más posibilidades de que sus correos sean reenviados.
Entre las categorías como ratio TINS más altos se encuentran viajes, citas y trabajos.
Comercio minorista y redes de social media sufren los TINS más bajos, con un 0,11% y 0,10% respectivamente, probablemente debido al alto número de mensajes que envían, así como al hecho de que los receptores de los correos no suelen darse de baja de los servicios de suscripción que ya no desean, según Return Path.