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Por Redacción - 9 Febrero 2021
La última novedad en la que trabaja Instagram tiene un aire un tanto tiktoker. La red social ha confirmado que está trabajando en una nueva vía para acceder a sus contenidos. Las stories podrían así empezar a servirse de modo vertical en vez de horizontal.
El cambio no parece gran cosa, pero en realidad dice mucho sobre quién es el nuevo rey de lo emergente en el mercado de las redes sociales. Las Vertical Instagram Stories, como publica TechCrunch, tendrán un acceso en vertical: no se tendrá que hacer un movimiento lateral para poder ver el contenido como ocurría hasta ahora. El scroll será horizontal.
Las stories que se leían de modo horizontal estaban inspiradas por el contenido que triunfaba en Snapchat y la manera que se empleaba para verlo. Las stories en vertical demuestran que Snapchat ha pasado de moda como el rey de lo cool y de las tendencias de última moda en internet. El trono está ahora en manos de TikTok (aunque, como siempre, hay que pensar hasta cuando).
De hecho, la migración de formato de lectura no solo supondrá un cambio en la estética, sino también posiblemente en los contenidos. Con un formato vertical, especulan en TechCrunch, posiblemente Instagram de prioridad a los contenidos en vídeo frente a las imágenes que ahora triunfan en las stories, para así competir de forma más directa con los contenidos que están haciendo que el uso de TikTok crezca.
La novedad no está disponible (todavía) para el público, pero fue desenterrada por usuarios de la red social, amplificada por los medios estadounidenses y confirmada por Instagram. Sea como sea, el movimiento - y ya simplemente que Instagram esté trabajando en ello - deja claro que la red de fotos quiere parecerse cada vez más a TikTok.
Pero ¿por qué Instagram quiere parecerse a la red de vídeos si TikTok, de entrada, es todavía una red social pequeña y no necesariamente su rival? Instagram es la red social de la imagen, en la que se muestra un mundo aspiracional y pasado por veinte filtros para hacerlo más positivo y bonito. TikTok es una red emergente que se ha hecho viral y ha atraído a más y más usuarios con vídeos de humor, challenges y contenidos que casi se podría decir que compiten (en esencia) más con lo que se publica en YouTube.
De entrada, está la presión del recién llegado y de lo que de la noche a la mañana se convierte en lo cool, lo atractivo y lo valorado. Es lo que ya le pasó a Instagram hace unos años con Snapchat. La red social se convirtió en la favorita de los adolescentes gracias a unos contenidos que desaparecían 24 horas después de publicarlos, lo que los posicionaba como una especie de salvaguarda en términos de privacidad.
Los adolescentes se pasaron en masa a la recién llegada (especialmente en Estados Unidos) y los snaps se convirtieron en una especie de nuevo elemento aspiracional para las redes sociales. De ellos nacieron las stories de Instagram y de ahí las de las demás redes sociales. Instagram fue rápida en su maniobra y evitó que los adolescentes huyeran en masa a la recién llegada. Snapchat nunca llegó a desbancar a las grandes redes sociales y su público se ha quedado muy limitado en términos de éxito global.
Para continuar, está esa cuestión de público y crecimiento. TikTok se ha convertido en la red social favorita de los adolescentes e Instagram no puede permitirse que le ocurra lo que le pasó a su casa madre, Facebook, que perdió el atractivo para los usuarios más jóvenes y se convirtió en un cementerio de contenidos.
La crisis del coronavirus ha tenido un impacto directo sobre TikTok: ha sido una de las grandes beneficiadas de los meses de confinamiento y ha visto cómo subían sus usuarios y el tiempo de uso que protagonizaban. El crecimiento ha sido, además, global, lo que la convierte en una amenaza muy seria.
Instagram debe, por tanto, atacar y neutralizar si quiere seguir siendo la gran reina de los social media y la estrella emergente.
