Por Redacción - 4 Julio 2011
Según los datos de un reciente estudio de Lab42, el 71% de los adolescentes encuestados prefiere enviar mensajes de texto antes que realizar llamadas telefónicas para comunicarse con su circulo de amigosmás cercano.
El promedio de mensajes enviados por este tipo de usuario adolescente con edades comprendidas entre los 14 y 17 años es de 30 mensajes diarios en el caso de lo chicos y hasta 100 mensajes diarios en el caso de las chicas. Entre los adolescentes adultos, mayores de 18 años, este promedio se reduce hasta los 10 mensajes de textodiarios.
Sin embargo, si extrapolamos estos datos y tenemos en cuentael aumento del uso de las redes sociales como un canal más de comunicación, no resultará difícil entender quede forma conjunta, ambos canalesse están convirtiendoenla forma principal de comunicación entre los adolescentes de hoy día.
Según un informe realizado por Pew Research Center, los SMS y las redes socialeshan superado a otras formas alternativas de comunicación como las llamadas de telefonía móvil, la mensajería instantánea y las conversaciones cara a cara.
Durante la"II Jornada Danba Menores en redes sociales" celebrada el pasado año, los expertos abordaron estos aspectos destacando queentre un 74% (chicos)y81,6% (chicas)de los adolescentes afirma utilizar este tipo de herramientas motivados principalmente por considerarse un canal para la comunicación entre los amigos.
Exceso de mensajes de texto: riesgos de salud para adolescentes
El30% de los padres “se queja frecuentemente del tiempo que sus hijos pasan conectados a las redes sociales”. En este sentido, los propios adolescentes reconocen una “cierta tendencia a perder la noción del tiempo” cuando navegan en Internet.
Diversos especialistas han sugerido a padres de adolescentes estar atentos a signos de excesostanto en el tiempo empleado en las redes sociales como enel envío de mensajes de texto por parte de sus hijos.
Las implicaciones de esta tendencia en aumento conlleva ciertos riesgos que deben de tener en cuenta. Según unestudio relacionado desarrollado porla Escuela de Medicina de Case Western Reserve, en Cleveland, Estados Unidos, esta tendencia podría ser perjudicial para los propios adolescentes o ser indicadores de otros excesos o riegos para la salud, además deimpedir un “desarrollo social normal”.
Otros estudios relacionados como el realizado por la MacArthur Foundation, arroja sin embargo conclusiones contradictorias ya que se señala que el tiempo empleado por los adolescentes en las redes sociales no sólo no es una pérdida de tiempo, sino que resulta valioso en términos de cultivar habilidades sociales y técnicas.