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La utilización de los smartphones o teléfonos inteligentes dentro de los establecimientos se ha generalizado mucho en los últimos meses pero dentro de esta nueva tendencia lo cierto es que su uso también depende del establecimiento en el que nos encontremos, siendo en los relacionados con la electrónica y las nuevas tecnologías en los que más se utilizan estos dispositivos. De acuerdo con el informe de Deloitte, un 49% de los compradores que se encuentran en tiendas dedicadas a la electrónica y las nuevas tecnologías utilizan los smartphone, logrando además influir en un 8,3% de las ventas. Así, electrónica y nuevas tecnologías se convierten en los establecimientos con el mayor uso y frecuencia de uso de los smartphones entre los otros once tipos con los que se compara el estudio, entre los que se destacan también los grandes almacenes, que ocupan el segundo puesto con un 46%, las tiendas de ropa que están en el tercero con un 38% seguidas por las tiendas de alimentación con un 35%. De media la influencia de los smartphones en las ventas es del 5,1%. Esta influencia se traduce en una previsión de ventas para 2012 de 159 billones de dólares, estimación que crece en un 20,6% para 2016, momento en el que se calcula que se alcanzarán los 689 billones de dólares en ventas. La verdad es que el uso de los smartphones se asocia a momentos en los que el consumidor está cerca de realizar una compra. Cerca del 60% de los compradores móviles utilizan sus smartphones en las tiendas mientras que un 50% los utiliza de camino a ellas. Por otra parte, dentro de esa influencia que parecen tener los teléfonos móviles entre los usuarios, las aplicaciones también juegan un papel importante. Un 37% de los usuarios de smartphones que utilizan su dispositivos para comprar poseen aplicaciones generales de compra y un 34% tiene aplicaciones específicas de distintas tiendas. El tanto por ciento de usuarios que se han pasado a las aplicaciones dedicadas o específicas es de un increíble 85%, un 21% más que los que no lo han hecho. El problema que surge ante los vendedores es el hecho de que ese 37% que utiliza aplicaciones móviles de compra a menudo compara precios, busca ofertas y utiliza más el famoso “showrooming”, práctica con la que los consumidores echan un vistazo a los productos en las tiendas para luego adquirirlos en cualquier Web. Un estudio reciente publicado por Microsoft sobre el tema muestra cómo una tercera parte de los consumidores ya utilizan sus teléfonos móviles para comparar precios de tiendas de alimentación tanto en la tienda como cuando planean acudir al establecimiento. Otro estudio, esta vez realizado por InMobi y Mobext, decide examinar tres dispositivos distintos, las tablets, los smartphones y los ordenadores personales con la idea de saber cómo se complementan los unos a los otros y cuándo, dónde y por qué se utilizan. Los resultados muestran cómo las tablets se prefieren para utilizar en casa y los smartphones para salir a la calle. Aún así, un 55% de los usuarios afirma que primero se informan sobre los productos en sus tablets, lo que sugiere que ningún dispositivo es ignorado.
