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Si la integración de los dispositivos móviles, como el smartphone y las tablets ya es total en nuestro día a día, sin los que no podemos vivir, la evolución tecnológica debía seguir su imparable camino y sorprendernos con nuevos desafíos. Ahora es el turno del nuevo proyecto de los de Mountain View, Proyect Glass; o las popularmente conocidas como "Gafas de Google". Ya en abril de 2012 la empresa hizo pública su nueva creación que hasta entonces parecía un secreto a voces en plena fase de desarrollo; pero no fue hasta el mes siguiente cuando, de manos del propio Sergey Brin, uno de los padres de Google, el prototipo tomaba forma real y se estimaba que en 2013 podría salir a la venta. Dicho y hecho, la repuesta de Googleno se ha hecho esperar. Recién comenzado el año las calles de Nueva York han sido el escenario donde se han podido ver algunos usuarios en actitudes de lo más cotidianas, portando estas exclusivas gafas como si tal cosa. La diferencia respecto a los otros modelos ya conocidos, es que estas gafas cuentan con vidrio óptico, frente a las de sol, o el modelo inicial, carente de lentes. Otro factor a tener en cuenta es que son individuos anónimos quienes hacen uso de este dispositivo, no se trata de los principales representantes de la compañía, como habíamos visto hasta el momento; lo que podría dar a entender que el proyecto se encuentra en una fase avanzada de experimentación. Aunque esto supone un gran paso, Google reconoce que todavía está en pleno periodo de cambios, realizando pruebas con el fin de determinar las funcionalidades con las que contará este dispositivo. Las pruebas indican que el proyecto va tomando forma a marchas forzadas. Existe una intención real por parte de Google para que sus gafas salgan al mercado lo antes posible. Hasta el punto de que ya tiene previsto lanzar una API, con el fin de que aquellos desarrolladores que lo deseen, ya puedan crear aplicaciones para Project Glass. Otros factores a tener en cuenta a la hora de perfeccionar el producto es la duración de la batería, o los riesgos de seguridad. Los de la factoría Google quieren que la vida útil de sus revolucionarias gafas sea de más de un día, de tal modo que los usuarios no tengan que cargarlas a diario. Por otra parte, tanto su diseño como el material empleado debe poner especial interés en eliminar la tensión ocular, así como reducir otros aspectos que puedan ser perjudiciales. Las perspectivas son halagüeñas, si todo se cumple, podríamos disfrutar de este novedoso dispositivo no muy tarde lo que supondría un nuevo paso haciauna nueva generación de la movilidad hiperrealista y a la conectividad entre personas más allá de los actualessmartphones.
