En el pasado Dmexco, feria del marketing digital, evento referente para esta disciplina, pudimos escuchar mensajes como: “En los próximos años algunas de las mejores ideas creativas vendrán del director de tecnología” (Bob Lord, CEO de AOL Networks).
En marketing lo realmente relevante para la toma de decisiones es la calidad de información que posea su organización y la capacidad para convertirla en conocimiento. Para esta función entre otras, la tecnología se consolida como el recurso más importante después de los recursos humanos.
Las empresas están realizando grandes inversiones en tecnología para poseer un marketing más eficiente. Recursos como los CRM, ERP, aplicaciones móviles y programas de control y desarrollo de estrategias, están fomentando resultados comerciales de mucho interés que justifican dichas inversiones. El desarrollo del marketing moderno, une su destino, sin duda, al desarrollo tecnológico, por lo que sus avances tan significativos en los últimos años, serían impensables sin el nivel tecnológico alcanzado, de tal manera que cada vez se avanza en tecnología con fines comerciales, la repercusión en marketing posee una incidencia estratégica y no solo en el marketing digital como podríamos pensar.
A nivel estratégico muchas empresas están consolidando fusiones, alianzas, joint ventures, patronazgos e incluso compras de empresas tecnológicas. Esto está creando situaciones de mercados y de tejido empresarial de diferente perfil al que apreciábamos hace unos años, y es que el marketing se ha puesto en manos de la tecnología para conseguir niveles de excelencia.
Sin embargo la inclusión de la tecnología y desarrollo de esta en los departamentos de marketing, no es una tarea fácil, que en ocasiones crea muchos más problemas que beneficios. Le hago algunas recomendaciones de gestión y relacionados con la inclusión de la tecnología en su departamento de marketing:
La tecnología se presenta como un valor claramente diferenciador para los resultados comerciales y son muchas las organizaciones que buscan su ventaja competitiva en un mayor nivel tecnológico. Por lo tanto será su desarrollo y nivel de innovación el que marcará el camino del marketing y su eficiencia. Empiezan muchas empresas a invertir más en tecnología que en marketing, lo cual nos indica que dos funciones, hasta hace poco tiempo distanciadas, se han convertido en dos complementos necesarios para alcanzar los objetivos comerciales. En este sentido me gustaría acabar con otra cita que pudimos escuchar en Dmexco: “En 2017 el director de marketing invertirá más en tecnología que el propio director de tecnología” (Michael Karg, CEO de Razorfish). Ese parece la tendencia para un futuro que ya está aquí.