Por Redacción - 8 Junio 2023
Los influencers y creadores de contenido han experimentado un enorme crecimiento y han transformado las redes sociales en una fuente principal de ingresos. Plataformas como TikTok, Instagram y YouTube se han convertido en canales populares para promocionar marcas y productos. Como usuarios y consumidores, estamos expuestos constantemente a este tipo de contenido promocional. Los influencers utilizan estrategias como sorteos, descuentos y vídeos elogiando nuevos productos para llamar la atención del mayor número posible de usuarios.
Es importante destacar que la publicidad en las redes sociales debe cumplir con todas las leyes vigentes en cada país y con las normativas específicas de cada plataforma. Aunque en España no existe una regulación específica para los influencers, Francia se ha convertido recientemente en el primer país europeo en aprobar una ley que define y regula la actividad de los creadores de contenido en plataformas como Instagram y TikTok. El objetivo principal de esta legislación es combatir las "malas prácticas" que algunos influencers pueden llevar a cabo aprovechándose de su influencia.
En España, existen diversas legislaciones que se aplican a los influencers que realizan publicidad en redes sociales. Entre ellas, destacan la normativa en materia de Propiedad Intelectual y protección de datos, la Ley General de Publicidad, la Ley de Competencia Desleal y la Ley General de Comunicación Audiovisual. Tal y como se señala desde maldita.es y según Maitane Valdecantos, abogada especializada en derecho digital y propiedad intelectual, la Ley General de Publicidad considera el trabajo de los influencers como una forma de publicidad y, por lo tanto, están obligados a respetar los límites de publicidad ilícita, incluyendo la publicidad encubierta. Por ejemplo, si un influencer promociona un producto en sus redes sociales sin indicar claramente que se trata de publicidad, este contenido se consideraría ilegal y podría dar lugar a denuncias tanto de otras marcas como de otros influencers.
La Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico, aprobada en 2002, también regula el comportamiento de los creadores y usuarios en Internet, estableciendo normas básicas de convivencia en el entorno digital. Según el artículo 20 de esta ley, los usuarios están obligados a identificar cualquier anuncio remunerado económicamente o en especie. En el caso de sorteos y ofertas, también se debe garantizar que la participación sea accesible y que las condiciones se expresen de forma clara e inequívoca.
Una legislación más reciente es la Ley General de Comunicación Audiovisual, que entró en vigor en julio de 2022. Esta ley establece por primera vez una serie de obligaciones para los influencers, considerándolos "usuarios de especial relevancia". Entre estas obligaciones se encuentra la de informar si el contenido puede ser perjudicial para la salud física, mental o moral de los menores, inscribirse en el Registro de Servicios de Comunicación Audiovisual y cumplir con las obligaciones en materia de comunicaciones comerciales establecidas en la Ley de Servicios de la Sociedad de la Información y del Comercio Electrónico.
Además de estas legislaciones, la Asociación Española de Anunciantes (AEA) y Autocontrol, un organismo independiente de autorregulación de la industria publicitaria en España continúan estableciendo códigos de conducta y buenas prácticas para los influencers y creadores de contenido en el ámbito publicitario.
La AEA ha desarrollado un Código de Autorregulación de la Publicidad para influencers, que busca promover la transparencia y la ética en las colaboraciones entre los influencers y las marcas. Este código establece que los influencers deben identificar claramente cuando están realizando una colaboración remunerada o promocionando un producto o servicio, utilizando etiquetas como #publicidad, #colaboración, #patrocinado, entre otros.
Por su parte, Autocontrol cuenta con un Sistema de Autorregulación Publicitaria, que supervisa y controla el cumplimiento de las normas publicitarias en España. Los influencers y creadores de contenido pueden someter sus colaboraciones publicitarias a un proceso de evaluación previa, para asegurarse de que cumplen con las regulaciones establecidas.
Es importante destacar que el incumplimiento de estas normativas y códigos de conducta puede llevar a sanciones y consecuencias legales para los influencers y las marcas involucradas. Por lo tanto, es fundamental que los influencers estén al tanto de las regulaciones vigentes y actúen de manera transparente y responsable al realizar colaboraciones publicitarias.
Es necesario tener en cuenta que las regulaciones y legislaciones pueden variar con el tiempo, por lo que es importante estar actualizado sobre las normativas específicas de cada país y consultar fuentes confiables o asesoramiento legal para obtener la información más actualizada. Además de las legislaciones y los códigos de conducta mencionados anteriormente, es posible que haya otros cambios y desarrollos en el ámbito de la regulación de los influencers y los creadores de contenido.
Por ejemplo, es posible que se establezcan más requisitos en cuanto a la transparencia de las colaboraciones publicitarias, como la obligación de revelar la cantidad de compensación recibida por parte de las marcas o la divulgación de cualquier conflicto de intereses relevante.
También es probable que las autoridades reguladoras continúen supervisando de cerca las actividades de los influencers y los creadores de contenido para garantizar el cumplimiento de las regulaciones existentes y tomar medidas en caso de infracciones. Además, es posible que se realicen esfuerzos para abordar cuestiones relacionadas con la protección de los derechos de los consumidores, como la veracidad de las afirmaciones realizadas en las colaboraciones publicitarias y la protección de la privacidad de los usuarios.
Es importante tener en cuenta que las regulaciones y los códigos de conducta en relación con los influencers y los creadores de contenido pueden variar en diferentes países y regiones. Por lo tanto, es fundamental que los profesionales de la industria estén al tanto de las regulaciones específicas de su país y se mantengan actualizados sobre cualquier cambio o desarrollo relevante.