Sí es un tema recurrente, trillado, la fidelización, pero sean tan amables de dejarme decir unas pocas palabras sobre ello, creo que les puede interesar, al fin y al cabo es el colectivo que mas rentabilidad nos genera. Convendrán conmigo que la necesidad que tenemos en estos tiempos de fidelizar a nuestros clientes se convierte en un objetivo no solo prioritario, sino estratégico. Está demostrado que un cliente fidelizado, es más rentable, se le conoce mejor y sobretodo es un activo de la empresa que genera un alto porcentaje de nuestra rentabilidad. Pero también podemos decir que el ratio de clientes fieles es un dato que nos indica cuantos clientes se sienten satisfechos con nuestras prácticas, y tendencia de este dato, si cada vez lo hacemos mejor o por el contrario se sienten mejor en otros “brazos”.
Estamos viendo en la práctica diaria de acciones empresariales a muchas compañías que intensifican su trabajo en pos de conseguir más clientes fieles. Esto, sin duda es digno de alabar, y seguro que generará buenos resultados, sin embargo, creo que en la “bolsa” de la fidelización se están metiendo acciones, conceptos y métricas que no se corresponden con la fidelización como tal, o al menos como aquella fidelización a la que hacemos mención en cuanto a su rentabilidad.
Es muy importante definir que es la fidelización en una empresa y probablemente habrá tantas formas de entenderlas como organizaciones, algunos dicen que la fidelización es hacer amigos, otros dicen que el cliente que me compra más de una vez, otro comentan que son los clientes que hablan bien de nosotros, yo le comento la que siempre mantengo y traslado a mis clientes, fidelización es la cantidad (tasa) de clientes que repiten de manera a voluntaria compra en mi empresa. Es decir, cuantificaremos como cliente fiel aquel que nos vuelve a comprar, que esta compra la realiza de manera voluntaria y que la decisión de compra se realiza por confianza en nuestros comportamientos y acciones comerciales. Esto es un cliente fiel, por lo tanto los ratios de fidelización que me muestran muchas empresas no se corresponden con esta descripción, y es que aprenderemos muy poco de los clientes si simplemente vemos cuantas veces viene a nuestra empresa a comprar, por lo tanto los amigos son amigos y no tiene porque hacernos rentables, y los que nos compren contra su voluntad no son fieles son obligados y por lo tanto vuelven porque somos su opción impuesta. Fijémonos en campañas de “fidelización” (obligatoria), alguna de gran éxito según sus responsables, que realizan muchas empresas, donde captan clientes a través de magnificas ofertas sobre productos o servicios a cambio de una permanencia obligatoria en la empresa. Son campañas económicamente muy bien trazadas, lo que no estoy tan seguro es de que primero: sea una campaña de fidelización, el termino se me antoja un eufemismo, y en segundo lugar si realmente son tan rentables como parecen, no obviamente en los meses en los que te obligan a comprar en esa empresa, si no en periodos un poco más largos.
Porque considero que no son interesantes en muchos casos estas campañas, ni económicamente ni a nivel de branding, probablemente porque que fuerzan la fidelidad.
Si les parece podemos echar un vistazo a estas campañas, me refiero a esas que consisten en ofrecer regalos para el cliente y que por supuesto obliga a un compromiso comercial por parte del cliente, observando cómo están diseñadas (un alto % de ellas) podemos identificar errores que van en contra de nuestros intereses comerciales:
En definitiva, la fidelización es rentable, cuando trabajemos todos/as en la empresa para ganarnos la voluntad de los clientes, véase como el proceso de captación de clientes fieles se asemeja mucho con el proceso de liderazgo de las personas. No confundamos CAMPAÑAS DE FIELIZACION CON CAMPAÑAS DE PROMOCION DE VENTAS.Esa rentabilidad tendrá interés y trascenderá en la organización, cuando efectivamente, libremente los clientes decidan que somos la mejor opción, esta es la verdadera ventaja competitiva de las empresas solventes. No confunda fidelizar clientes con comprar clientes, obligar a clientes o retener a clientes, son conceptos que están al lado del principal, la fidelización, pero que en absoluto son sinónimos, y en términos económicos no son ni primos hermanos. Todos esos términos se diferencian en la causalidad, ¿por qué vienen los clientes a mi empresa?, cuando no sea la voluntad del cliente esa causa, algo estaremos haciendo mal y lo pagaremos, antes o después. La solución trabajar por crear clienTes fieles, no clientes “presos”. Le ha merecido la pena dedicar esos 5 minutos a la lectura de este tema tan trillado?, espero que sí