Frente a los diversos retos que plantean los avances de las tecnologías de información y comunicación, la postura de aprendíz siempre brinda una perspectiva gerencial más amplia y práctica. Siempre ganan más las empresas y personas que ponen énfasis en buscar comprender los medios sociales más como un fenómeno humano que tecnológico. A fin de cuentas, la calidad y profundidad de las relaciones entre las personas y estas con las empresas, los factores que determinan el rumbo de los negocios contemporáneos. Sin embargo, se puede observar que la mayoría de los gerentes y empresarios se aproximan a los medios sociales sólo buscando satisfacer sus objetivos comerciales. Ese enfoque está bien, porque cualquier recurso de comunicación sirve para ese propósito. Pero hay otros objetivos de especial importancia, que no deben darse por sobrentendidos para sacarle provecho a los diferentes servicios 2.0. Por ejemplo, para cualquier empresa o emprendendor, tiene mucho valor: 1. Aprender de la forma en la que la gente dialoga en las diferentes redes sociales, en función de comprender por qué unos mensajes y estilos funcionan y otros no. 2. Aprender de cómo otros empresarios están utilizando estas herramientas de comunicación de manera exitosa para ampliar y consolidar la imagen pública de sus negocios. 3. Aprender cómo adaptarse a estas redes para poder utilizarlas en función de las necesidades y condiciones específicas de cada empresa. Así pues, el aprendizaje es un gran beneficio inmediato de las redes sociales, porque permite formular mejores respuestas a las exigencias gerenciales concretas que hay para cada negocio. En otras palabras, si no se tiene una clara una estrategia para usar las redes sociales en función de sus objetivos comerciales, buscar aprender con rapidez y precisión es suficiente estrategia para estructurar un plan de trabajo de mercadeo y comunicación. Un plan estratégico en torno al aprendizaje. Este es el enfoque más económico y rentable que puede aprovechar cualquier empresa para dirigir sus acciones de negocio con los medios sociales. Y estas son algunas de las preguntas que pueden guiar el proceso de elaboración de un plan de trabajo 2.0 para una empresa, grande o pequeña, con experiencia o apenas comenzando:
Para acelerar el aprendizaje gerencial sobre las redes sociales. Es particularmente productivo estar atento de las cosas que hacen y dicen otros emprendedores y gerentes, que a uno le habría gustado hacer o decir. Muchas veces sus mensajes sirven de inspiración de lo que la empresa de uno podría hacer. En este sentido, y para acelerar su plan de aprendizaje sobre las redes sociales: 1. Investigue, identifique y sega a personas u organizaciones influyentes en su área de negocio, o de las cuáles tenga que aprender aunque estén en otros mercados. 2. Participe en los diálogos que ya hay, relacionados con sus temas de interés, opinando y, mejor aún, consultando, haciendo preguntas abiertas y pidiendo consejos. 3. Obsequie consejos útiles para la gente interesada en los temas relacionados con los productos y servicios de su negocio, o recomiende los consejos de otros. Hágale seguimiento a las reacciones que producen sus recomendaciones. Siempre tenga presente, que el camino más rápido para el aprendizaje es el de la práctica. Es un principio clave, muy bien condensado en esta frase que se le atribuye a Confucio: "Me lo contaron y lo olvidé; lo vi y lo entendí; lo hice y lo aprendí". Y si quieres más sinergia aún para el aprendizaje, fomenta la participación de los miembros de tu equipo de trabajo en este mismo proceso, con los mismos criterios que he comentado antes. Recuerda que de una u otra forma todos los empleados son portadores de la imagen de una empresa. Por lo tanto, si le das la debida formación, ellos pueden hacer un aporte valioso a la buena reputación de tu negocio en las redes sociales (algo que también se aprende).