Por Redacción - 25 Junio 2024
El año pasado, las búsquedas relacionadas con rebajas comenzaron a principios de junio y se concentraron en los siguientes 30 días. En este periodo, se incrementaron las búsquedas de “rebajas de verano”, “promociones zapatillas” o “rebajas sandalias” hasta un 75% en comparación con 2022
Cada año, los españoles preparan su bolsillo para hacerse con básicos de verano, regalos o algún capricho durante el periodo de rebajas. Este hábito se ha incrementado últimamente, ya que el gasto medio en rebajas en lo que llevamos de 2024 ha sido de 345 euros, un 25% más que en 2023, así lo ha comunicado el Observatorio de Cetelem.
Para las empresas, sobre todo para los ecommerce, puede llegar a convertirse en una época de éxito, ya que trabajando adecuadamente una estrategia de estacionalidad basada en el comportamiento de compra y preferencias de su público objetivo, tienen la posibilidad de aumentar sus ventas hasta un 80% en comparación con estrategias de remarketing común, así lo reconoce Redegal, compañía full digital de alcance global. La tendencia muestra que los usuarios empiezan a buscar productos con más anticipación para encontrar promociones. Por ello, es crucial que los ecommerce recopilen datos de los consumidores y consideren los tiempos de su público objetivo, los picos de interés en ciertos productos y los momentos de compra, para diseñar estrategias efectivas.
El año pasado, las búsquedas relacionadas con rebajas comenzaron a principios de junio y se concentraron en los siguientes 30 días. Esto deja ver la importancia de la fase previa a la activación de las rebajas. En este periodo, se incrementaron las búsquedas de “rebajas de verano”, “promociones zapatillas” o “rebajas sandalias” hasta un 75% en comparación con 2022, según un análisis de mercado de Redegal.
Siguiendo la misma línea, las rebajas de verano de 2023 mostraron un aumento significativo en la demanda, principalmente de ropa, paquetes vacacionales, cuidado personal y belleza. Estos datos presentan un entorno optimista, aunque los consumidores aún son cautelosos y cuidan sus gastos, lo que los lleva a una larga y amplia fase de descubrimiento antes de decidir qué comprar, y no necesariamente con una marca en mente.
Las estrategias de marketing estacional sirven para despuntar las ventas en periodos convulsos en compras, como por ejemplo rebajas o Black Friday. Las empresas incrementan sus esfuerzos para corresponder a la demanda creciente de ciertos productos, aprovechando también para crear campañas originales que conecten con su público objetivo y despierten un sentimiento o sensación de urgencia.
Para garantizar el éxito de estas estrategias, es crucial analizar datos históricos, echar mano de nuestras propias audiencias (uno de los activos más valiosos), definir objetivos claros, crear contenido adecuado a cada fase del funnel de conversión, optimizar el sitio web, elegir los canales de promoción correctos y medir los resultados para ajustar las campañas en tiempo real y sacar aprendizajes a futuro, asegurando así su efectividad y mejora continua.