Un estudio realizado por Cordial ha revelado que la lealtad de los consumidores hacia sus marcas favoritas es, en su mayoría, superficial. Cordial llevó a cabo una encuesta detallada en la que se investigó el equilibrio entre la fidelidad del cliente y la conciencia de costos. El objetivo fue conocer los enfoques que las empresas adoptan para manejar esta tensión fundamental.
Según los resultados obtenidos, se puede observar que la mayoría de los clientes están dispuestos a sacrificar su lealtad a marcas conocidas y confiables si eso significa obtener ofertas más económicas. La asequibilidad y la disponibilidad de productos son aspectos clave para los consumidores en la actualidad, y el precio se ha convertido en un factor determinante para decidir qué productos se incluyen en las compras a nivel global. En lugar de depender únicamente de marcas y productos de renombre, los consumidores valoran cada vez más la relación calidad-precio al tomar decisiones de compra.
Cordial llevó a cabo una encuesta en la que participaron más de 1000 clientes y expertos en marketing B2C. Los resultados revelaron que el 70% de los encuestados estaría dispuesto a cambiar de marca si se les presentara una oferta mejor. Para más de la mitad de los consumidores, los descuentos deben ser relevantes para influir en su decisión de compra.
A pesar de que el 74% de los encuestados dijo que los cambios económicos habían aumentado su probabilidad de inscribirse en programas de fidelización, estos estaban dispuestos a abandonar la lealtad por precios más bajos. Por otro lado, el 56% de los especialistas en marketing B2C afirmaron que no ofrecían descuentos ni ajustaban los precios. Además, el 58% de los expertos en marketing considera que sus programas de fidelización podrían ser más efectivos.
Según los datos, los descuentos son altamente valorados por la mayoría de los clientes. No obstante, los expertos en marketing deben tener en cuenta el tipo de ajustes de precios que realizan y asegurarse de que sean relevantes para su público objetivo. Para que los programas de lealtad sean efectivos, es necesario ofrecer incentivos que realmente conecten con los consumidores. Aunque la lealtad sigue siendo fundamental para establecer relaciones duraderas con los clientes, no se puede asumir como algo garantizado.
En general, los clientes pueden estar dispuestos a renunciar a la lealtad a una marca a cambio de precios más bajos. Sin embargo, la respuesta puede variar según la situación y el tipo de cliente.
Por ejemplo, los clientes que tienen un presupuesto limitado o que buscan ahorrar dinero pueden ser más propensos a cambiar de marca si encuentran precios más bajos. En contraste, los clientes que valoran la calidad y la experiencia de marca pueden estar dispuestos a pagar más por los productos o servicios de una marca en la que confían.
Además, la competencia en el mercado también puede influir en la disposición de los clientes a cambiar de marca. Si hay muchas opciones similares disponibles a precios más bajos, los clientes pueden ser más propensos a cambiar de marca. Por otro lado, si una marca tiene una posición única en el mercado o ofrece un valor agregado que los clientes valoran, pueden ser menos propensos a renunciar a esa marca por precios más bajos.