Por Redacción - 8 Enero 2025
Mientras la Inteligencia Artificial redefine el panorama de la ciberseguridad, organizaciones de todo el mundo se enfrentan a desafíos crecientes para protegerse de ataques sofisticados respaldados por esta tecnología. Sin embargo, a pesar de comprender la magnitud de la amenaza, las empresas tienen dificultades para mantenerse al día con la rápida evolución del cibercrimen. Obstáculos como la escasez de habilidades, la falta de herramientas impulsadas por IA y la complejidad de gestionar infraestructuras avanzadas de ciberseguridad dejan a muchas organizaciones en situación de vulnerabilidad.
En su estudio “Defensa cibernética e IA: ¿estás listo para proteger tu organización?”, Kaspersky recopiló información de profesionales de TI y Seguridad de la Información de pymes y grandes empresas. La investigación revela una creciente sensación de urgencia en las organizaciones españolas para prepararse ante las ciberamenazas impulsadas por IA, con un 22% de los encuestados que afirmaron tener brechas considerables en su protección cibernética. El estudio también explora los obstáculos para lograr una ciberseguridad efectiva y las graves consecuencias de no adaptarse.
A pesar de comprender los riesgos, las empresas se enfrentan a importantes obstáculos para construir una sólida ciberseguridad. Según el estudio, el 34% de las organizaciones en España menciona la falta de formación en ciberseguridad relacionada con IA entre sus empleados como un problema crítico. Otro 32% señala la complejidad de gestionar la infraestructura de ciberseguridad, lo que dificulta ir por delante de los atacantes. La escasez de herramientas avanzadas es otro desafío clave: el 43% de los encuestados admitió que sus organizaciones carecen de soluciones de ciberseguridad modernas impulsadas por IA, mientras que el 38% enfrenta la falta de información procedente de expertos externos sobre el panorama de amenazas relacionadas con IA en constante evolución. Además, el 32% experimenta la escasez de profesionales de InfoSec cualificados, lo que deja a las empresas expuestas a amenazas cada vez más sofisticadas.
Las consecuencias de no adaptarse son graves y de gran alcance. Más de la mitad de los profesionales españoles encuestados (51%) teme que la falta de preparación derive en filtraciones de datos confidenciales, mientras que el 47% anticipa la pérdida de la confianza de los clientes y un 46% pérdidas financieras significativas, que incluyen caídas en el valor de las acciones y pérdida de oportunidades de negocio. El daño reputacional preocupa a la mitad de los encuestados (50%), que temen las repercusiones a largo plazo de un ciberataque. Otras posibles consecuencias incluyen sanciones financieras (32%), retiro de inversores (29%), demandas (29%) e, incluso, cierres parciales de la empresa (21%).
“El auge de los ciberataques impulsados por IA marca un punto de inflexión en el panorama de la ciberseguridad. Las organizaciones deben actuar ya para reforzar sus defensas. Esto incluye invertir en herramientas impulsadas por IA, capacitar a los empleados para que reconozcan las amenazas relacionadas con IA y desarrollar e implementar controles de ciberseguridad para productos y servicios con IA. No adaptarse podría conducir a daños significativos a nivel financiero, operativo y de reputación. La preparación no una opción, sino una necesidad en esta nueva era de ciberamenazas”, afirma Alexey Vovk, director de Seguridad de la Información en Kaspersky.