Por Redacción - 28 Marzo 2016
No es una cosa nueva ni una que pille por sorpresa. De hecho, no mucho antes de que saliese este estudio salió otro en el que se apuntaba que los trabajadores del área de marketing suelen quejarse de que se infravaloran sus capacidades y que por tanto no se está sacando todo el potencial posible a su perfil. Y posiblemente cualquier responsable de una agencia pueda decir claramente lo mismo: la rotación de personal puede ser muy elevada y el captar talento es una lucha constante. Los trabajadores del sector posiblemente hablarán de las condiciones duras del sector, de las jornadas que pueden ser maratonianas y de que hay mucha competencia para los puestos de trabajo. Sea como sea, el mundo del marketing no es sencillo y muchos, al final, acaban tirando la toalla.
La rotación de personal y el abandono de carreras en el mundo del marketing es bastante sangrante y es además cada vez mayor.
Los problemas se están enquistando y los ratios de abandono del mundillo se están disparando, como acaba de demostrar un estudio de 4A y LinkedIn que ha analizado cómo se sienten los trabajadores de las agencias de marketing y publicidad y por qué abandonan sus trabajos.
El mundo publicitario tiene la mayor rotación de personal, al menos mucho más elevada que la de las industrias relacionadas. Este cambio de posiciones y este salto de una empresa a otra no está a punto de acabar o no parece que vaya a estarlo en el futuro próximo. Según los datos del estudio, en el último año ha subido en un 10%.
¿Por qué todo el mundo parece acabar abandonando el mundo del marketing y la publicidad? Partiendo de los datos del estudio se pueden establecer tres razones fundamentales que explican esta realidad.
Lo cierto es que no es un problema únicamente del mundo del marketing, sino que se comparte en muchas y muy variadas industrias. Los trabajadores esperan una cosa y la realidad es mucho más cutre, menos glamurosa y mucho más aburrida de lo que se esperaban. ¿Cuántos estudiantes de periodismo no esperan acaso ser corresponsales de guerra o protagonizar una investigación digna de igualar a la que se ve en Spotlight? La verdad es que posiblemente acaben escribiendo de noticias locales o en algo que les parecerá que cambia mucho menos el mundo como, por ejemplo, escribir obituarios. Con el marketing pasa lo mismo y, como explican los responsables del estudio, es aún más sangrante. Al fin y al cabo, el mundo del marketing es un mundo que vive de vender bien las cosas. La industria no se está vendiendo a sí misma bien. Todo el mundo espera convertirse en Don Draper y acaba haciendo cosas mucho menos atractivas.
Pero lo cierto es que no solo el choque entre la realidad y lo esperado es duro, la realidad también lo es por ella misma. Las condiciones de trabajo no son las que los trabajadores esperan y sobre todo no son las que les hacen seguir en el sector. Tras entrar, darse de bruces con la realidad e intentarlo, la realidad y sus condiciones hacen que los trabajadores cambien de trabajo dentro del sector o simplemente dejen el sector.
El primer punto de tensión son los salarios. Según los datos del estudio, los trabajadores ven un problema en los sueldos (la diferencia entre los trabajadores junior en tecnología y en marketing en Estados Unidos es de una media de 45.000 dólares anuales; no hay datos de España pero aunque no habrá una separación tan elevada es más que probable que sea igualmente sangrante). A pesar de ello, el sueldo no es lo primero por lo que dejan el sector.
El segundo punto de tensión (pero el que realmente hace que dejen el marketing) es el techo: avanzar en la industria resulta imposible. Un 54% de los que abandonaron su carrera en el marketing lo hicieron porque consideran que el mercado tiene muy pocas oportunidades para avanzar en su carrera. Los trabajadores se sienten frustrados porque sienten que siempre serán lo mismo y harán lo mismo.
A todo esto, hay que sumar que el trabajo que están haciendo no les resulta ni interesante ni motivador. Un 50% de los trabajadores de las agencias querían tener labores más motivadoras, que fuesen más un reto (en la media global de los trabajadores esta cifra es del 36%).
Además, no solo el trabajo que hacen les parece aburrido y poco interesante, también es muy probable que odien a su jefe. Un 46% de los trabajadores de agencias señala que el liderazgo de la firma es insatisfactorio y un 45% querría recibir más reconocimiento por lo que hacen.