Por Redacción - 1 Marzo 2022
En los últimos años, Amazon se ha convertido en uno de los players solventes del mercado publicitario. La tienda online es ya un escaparate para los anuncios, uno que genera cada vez más ingresos al gigante y que ha llevado a que se empiece a hablar ya de tripolio en publicidad online. Amazon tiene a su favor que es la puerta de entrada en navegación de producto para muchos consumidores (incluso cuando después no compran esos productos en la plataforma) y también su amplio arsenal de datos, que le permiten conocer muy bien a los compradores.
Ahora, Amazon está ultimando un asalto a un nuevo formato publicitario. Sus anuncios van a llegar a espacios físicos y van a competir con la publicidad en exteriores y puntos de venta de otros gigantes. Es casi como un asalto a los anuncios tradicionales.
Amazon va a empezar a posicionar anuncios en algunas de sus tiendas físicas a partir del segundo trimestre del año, como apunta Insider, que ha tenido acceso a información exclusiva sobre el movimiento.
Aunque las tiendas en cuestión están en Estados Unidos, no hay que olvidar que los planes de expansión de Amazon incluyen llevarlas más allá de ese mercado y esos anuncios podrían llegar, potencialmente, a otros países. Se espera, por ejemplo, y como apuntaba hace unas semanas InfoRetail, que las tiendas sin cajero de Amazon lleguen a España en 2024. Hipotéticamente, los anuncios podrían llegar después.
Pero, volviendo a lo que se sabe ya vía filtraciones a Insider, Amazon va a empezar a posicionar anuncios en las pantallas de sus tiendas, buscando así ampliar la rentabilidad de esos espacios, especialmente de las tiendas Amazon Fresh. Los anuncios encajarán con el formato digital signage. Las pantallas que hay en las tiendas de Amazon serían así espacios publicitarios.
También se estaría valorando incluir anuncios personalizados en los carros de la compra inteligentes que tienen las tiendas y en los quioscos de pago. Incluso, Amazon podría convertir las puertas de las neveras en espacios para los anuncios, haciendo que estos aparezcan ante el consumidor.
Según los documentos que ha analizado el medio estadounidense, Amazon vendería estas campañas del mismo modo que vende los anuncios programáticos que ahora mismo sirve en web y en televisiones conectadas.
En cierto modo, el movimiento es lógico. Amazon quiere convertirse en un player potente del mercado publicitario y monetizar más sus tiendas físicas. Y la industria del retail en general no es ajena a la publicidad: sus competidores en EEUU, los gigantes de la distribución, ya venden espacio publicitario en tienda a las marcas de productos de supermercado.
La idea de incluir anuncios en pantallas y ajustarlos a los consumidores no es exactamente nueva. Ya hace unos años se hablaba del potencial de la personalización y de la habilidad para meter más publicidad en supermercados.
El gran reto está en lograr un equilibrio entre la publicidad y la experiencia de compra, para que los consumidores no se sientan sobrecargados de anuncios, y entre los datos que se usan y cómo. Por muchos datos que Amazon pueda usar, un exceso de personalización podría potenciar una cierta sensación de momento inquietante e invasión de la privacidad que ninguna marca quiere ahora mismo cruzar.
