Por Redacción - 12 Enero 2021
Burger King acaba de presentar su nueva identidad: la compañía ha hecho un proceso de rebranding en el que ha ajustado su imagen visual para adecuarla a los nuevos tiempos. Es el primer rebranding de la compañía en 20 años.
La compañía ha explicado en la nota de prensa en la que adelanta cómo serán su nuevo logo, su nuevo packaging y sus nuevos elementos visuales que se ha inspirado en la "comida real y deliciosa" que ofrece. El nuevo look quiere ser representar "más auténticamente" a la compañía y sus características y valores.
La empresa vincula esta nueva imagen visual a los cambios y ajustes que han hecho en sus menús, sus sabores, sus elementos (han cambiado cómo usan conservantes o colorantes) o en su compromiso de sostenibilidad. Quieren que los consumidores se sientan bien con la marca y la nueva identidad visual es un elemento más en ese reposicionamiento.
Así, la nueva imagen incluye nuevos logo, packaging, merchandising en restaurantes, cartas con los menús, uniformes o decoración. Por supuesto, también cambiarán las imágenes en redes sociales y elementos de marketing digital y presencia online.
"Queríamos usar el diseño para que la gente desee nuestra comida: es perfección hecha a las brasas y sobre todo su sabor", asegura Raphael Abreu, el responsable global de diseño de Restaurant Brands International, los dueños de Burger King.
Y, en cierto modo, en medio de estas declaraciones feel good y de autobombo corporativo se puede encontrar la esencia de lo que busca Burger King con su cambio de imagen y lo que implica. Como señalan en Marketing Dive, el rediseño de la imagen de marca de Burger King tiene dos grandes líneas maestras.
Por un lado, está toda la cuestión de la herencia, la tradición. La nueva imagen bebe de la historia de la marca y de su tradición, de la historia común que tiene con el consumidor. De hecho, podemos añadir a todo esto, tiene un aire ligeramente retro, lo que le da un cierto aire de nostalgia y lo vincula con esos tiempos mejores que los consumidores conectan con el pasado.
Por otro lado, sin embargo, la nueva imagen de Burger King está muy pensada para internet. Es una imagen corporativa para los tiempos de la red, diseñada para funcionar especialmente bien en los entornos online. El logo se ha vuelto más minimalista y más moderno, mucho más friendly para los entornos digitales. Como recuerdan en el medio estadounidense, el proceso de diseño ha sido una muestra del compromiso de la marca con la "digital-first expression", el pensado antes para posicionarse en lo digital.
Por supuesto, Burger King no ha sido la única que lo ha hecho. Muchos de los cambios en logos e imágenes corporativas que se han visto en estos últimos años han ido esa dirección. Las compañías ajustan lo que hacen para que funcione mejor en esos entornos.
El nuevo logo sustituye al que la compañía empleaba desde 1999. Es, como ya se ha indicado, más minimalista y más sencillo. Según Burger King es "confiado" y "divertido". Aunque está pensado para la era de la red, lo hace desde el diseño y los elementos tradicionales de marca. La compañía ha creado además una tipografía propia, llamada Flame (llama). Se han inspirado para crearla en la comida que sirven y en sus formas (esto hace que sea "redondeada, atrevida, sabrosa", al menos según la empresa).
También han cambiado los colores, que ahora serán más "ricos y atrevidos" y se vincularán al proceso de hacer las cosas en parrilla que es la esencia de lo que quiere vender la marca. En las fotos que usen, se emplear una hipertexturización para destacar "el aspecto sensorial de la comida".
En el packaging, ahora usarán colores atrevidos, ilustraciones de los ingredientes y el logo de forma visible.
La nueva imagen empezará a desplegarse por la cadena durante este año.
