Quiénes toman las decisiones y quiénes ocupan los puestos de poder es algo muy importante, porque impacta de forma directa en qué decisiones toman y en qué es lo que se prioriza en las decisiones de negocio. Por ello, las ejecutivas de las compañías deberían ser lo más parecidas al mercado en el que operan, a sus consumidores, de lo posible, pero, como los estudios no paran de denunciar, eso no ocurre. Las direcciones corporativas tienen un problema evidente de sesgos.
También ocurre en el universo de los medios, la comunicación y el marketing. Si se analizan quiénes son las personas que toman las decisiones, se verán que hay un desequilibrio de género. Eso es lo que acaba de hacer un estudio de LinkedIn, poniendo en cifras cómo en la industria sigue existiendo un techo de cristal. Sus conclusiones señalan que las mujeres están infrarrepresentadas en la industria de la comunicación y media.
A nivel global, las mujeres solo son el 37% de los puestos de liderazgo en esa industria. Esto ocurre a pesar de que, en líneas generales, son más las que trabajan en este terreno. Prácticamente, la mitad de la industria mundial son mujeres (el 48% de todas las personas que trabajan en ella). Pero si en líneas generales se puede decir que una de cada dos personas en plantilla es una mujer, no se puede decir lo mismo con los puestos de dirección.
Para llegar a esas cuentas, el estudio ha analizado cuántas mujeres desempañan cargos de directora, vicepresidenta y otras posiciones dentro de la C-suite o como partners. Luego lo han comparado con el total de la industria y con cuántos hombres tienen también esos cargos. Como apuntan en MarketingWeek, para hacer los cálculos han tenido presentes también profesiones de nuevo cuño, como marketing manager, especialistas en marketing o expertos en marketing digital, que sumaron en el cómputo final. La suma no da un resultado exactamente igualitario.
Incluso en los países en los que el liderazgo presenta mejores datos que la media global, no se llega a ese equilibrio del uno de cada dos. Singapur es el mercado en el que se está más cerca, con un 44% de mujeres directivas. Por detrás se posicionan Estados Unidos (43%), Australia (42%), Francia (41%) e Italia (40%), que completan el top cinco de los países con los mejores datos en equilibrio en igualdad. Los países con peores datos son, por el contrario, India (23%), Países Bajos (28%) y Emiratos Árabes Unidos (30%).
Aunque las empresas son cada vez más conscientes de estos datos – y también de cómo afecta a sus cuentas de resultados – esto no lleva a que estén corrigiendo por completo la situación. De hecho, el estudio indica que el fichaje de mujeres para estos puestos creció en un 5% entre 2015 y 2022, pero también que eso no es exactamente suficiente. La industria debe hacer un trabajo extra y en serio si quiere tener una línea directiva equilibrada y sin sesgo de género.
“Es crítico que trabajemos para dar la vuelta a este desequilibrio ahora antes de que la distancia se amplie”, recuerda Tom Pepper, director senior en LinkedIn Marketing Solutions.
Para lograr reducir ese desequilibrio, el análisis recomienda más flexibilidad en el trabajo – las mujeres tienden a proponerse para puestos que permiten el teletrabajo, han descubierto – pero también un trabajo interno, con más acciones de formación interna y con canales de análisis de candidaturas que sean también equilibrados en términos de género. Dejar de preguntar “cuánto ganabas en tu anterior trabajo” también podría ayudar a reducir la brecha de género, concluyen.