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Por Redacción - 19 Febrero 2015
Se avecinan cambios notables en el universo YouTube. Así, los forofos de esta red social podrán disfrutar en breve de los contenidos visuales que esta les ofrece sin tener que maniobrar a la hora de recibir la intrusiva publicidad por la que esta red social se caracteriza.
De hecho, Google tiene en mente implantar un sistema de suscripción a YouTube, de modo que los internautas evitarán los anuncios que saltan en cada uno de los vídeos que reproducen o que se sitúan en los bordes de sus pantallas. Sin embargo, no todo es oro lo que se desprende de la noticia, ya que este servicio de suscripción será previo pago por parte de los usuarios.
La noticia ha volado como la pólvora y la misma es consecuencia de las declaraciones vertidas en la CNBC por el director de contenido y de negocio de la compañía, Robert Kyncl, quien ha sugerido que Google se encuentra pormenorizando los últimos coletazos del lanzamiento de esta nueva vía de negocio de la red social.
El portal, que cuenta entre sus cifras más espectaculares con una comunidad de usuarios superior a los 1.000 millones de internautas, lleva estudiando desde hace tiempo la implantación de un servicio de pago sin anuncios. Durante los diez años que lleva en marcha se ha convertido en la segunda mayor plataforma por la que se inclinan los usuarios a la hora de llevar a cabo sus búsquedas, únicamente por detrás de la compañía que la adquirió hace pocos años.
La rentabilidad de la suscripción
Aunque existen sistemas que eliminan la publicidad de este tipo de portales, de carácter no autorizado, Google focaliza sus esfuerzos en que estas alternativas dejen de ser efectivas para los usuarios y estos puedan inclinarse únicamente por sus herramientas.
Así, la compañía se encuentra preparando un servicio de suscripción que gane usuarios desde el primer momento, por lo que no ha dudado a pagar s los desarrolladores de estos programas para que bloqueen la publicidad ajena a ellos.
Nueva estrategia de uno de los gigantes de Internet que se encuentra desarrollada en el marco de otras operaciones. Entre estas destaca el lanzamiento, también por suscripción de música a través del servicio YouTube Music Key.
A la zaga de otras compañías
Sin embargo, la apuesta de Google no es novedosa ni única en el mercado. Por el contrario, existen otras plataformas que ya han apostado por eximir de publicidad a sus usuarios y que estos reciban sus servicios mediante el pago de una determinada cantidad, bien mensual, bien trimestral o por contenido utilizado.
Ejemplos de ello son la plataforma de vídeo bajo demanda Netflix, que ofrece planes de suscripción a sus clientes, o el portal de música Spotify, que permite suscribirse durante tres meses a su servicio Premium por solo 90 céntimos.
Una vez más la diferencia entre ambos se encontraría en la tipología de los contenidos a los que se accede. Y es que mientras los citados forman parte del material de la industria, en el caso de esta red social pertenecen al entretenimiento. Lo que queda por ver es el modo de retribución de los autores que configuran los canales de vídeos más vistos en YouTube, ya que si ahora subsisten de los ingresos publicitarios, la compañía deberá corresponderles con una parte del pastel del servicio de suscripción.
