Por Redacción - 28 Febrero 2024
El año 2023 marcó un hito sorprendente con una caída masiva en la propiedad de dispositivos digitales. Aunque la tendencia declinante de PC, portátiles y tabletas no fue sorpresa, lo que llamó la atención fue la disminución generalizada en la propiedad de dispositivos como consolas de juegos y dispositivos de realidad virtual, según los datos revelados por Stocklytics.com.
El Informe Global Digital 2024 arroja luz sobre esta situación, destacando que siete de cada diez dispositivos digitales experimentaron una caída en su propiedad durante el año anterior. Entre todos los dispositivos, los teléfonos móviles y los teléfonos inteligentes fueron los únicos que experimentaron un aumento en la tasa de propiedad, mientras que los dispositivos de realidad virtual sufrieron una caída notable del 21%, señalando un cambio en la percepción y adopción de esta tecnología. Este fenómeno plantea preguntas sobre el cambio de preferencias del consumidor y el impacto en la industria tecnológica en general.
La caída en picado de la realidad virtual plantea interrogantes cruciales sobre el futuro del metaverso, un concepto que ha ganado relevancia en los últimos años debido a su potencial para las empresas y marcas. El primer factor identificado es el elevado costo de los dispositivos de realidad virtual, lo cual restringe su accesibilidad a un público más amplio. La falta de contenido atractivo y las limitaciones tecnológicas también han contribuido a este declive. Aunque las gafas de realidad virtual de Apple, Vision Pro, podrían tener un impacto positivo a largo plazo en el metaverso, su precio elevado sigue siendo un obstáculo para su adopción generalizada. Además, dispositivos como las nuevas Oculus Quest 3, a pesar de ser más asequibles, no están experimentando la aceptación esperada. Como es evidente, a pesar de las promesas del metaverso, persisten obstáculos significativos que deben superarse para lograr una adopción masiva de la realidad virtual.
Estos factores no solo han influido en la caída de los dispositivos de realidad virtual, sino que también han dejado su huella en el metaverso en sí mismo. La reducción en la posesión de dispositivos VR podría ralentizar el desarrollo y la adopción del metaverso por parte del público en general. Aunque este revés en 2023 no significa la muerte del metaverso, plantea desafíos que la tecnología y la industria deberán abordar de manera proactiva. Para las marcas que apostaban fuertemente por el metaverso, las implicaciones son inmediatas y significativas. Con menos personas utilizando dispositivos de realidad virtual, el público objetivo se reduce, lo que lleva a un impacto negativo en el alcance de las campañas de marketing. La incertidumbre en el retorno de inversión podría generar dudas sobre la rentabilidad a corto plazo de las inversiones en el metaverso.
Muchas personas encuentran que, después de un breve momento de entusiasmo inicial por la novedad, los dispositivos de realidad virtual terminan olvidados en el fondo de un cajón.
En la actualidad, las marcas se encuentran ante la urgencia de reconsiderar sus estrategias de marketing en el metaverso. La adaptabilidad se convierte en un factor crucial para superar este desafío. Es importante reconocer que el metaverso constituye un ecosistema amplio que abarca más allá de la realidad virtual, incorporando tecnologías como la realidad aumentada y la realidad mixta. Sin embargo, la baja penetración de la tecnología VR y el metaverso limita la efectividad de las campañas, con pocos ejemplos de éxitos y dificultades para medir el retorno de la inversión.
Además, el alto costo asociado con el hardware, software y desarrollo de experiencias restringe la rentabilidad por lo que invertir en realidad virtual y marketing en el metaverso podría representar una apuesta hacia el futuro, pero en la actualidad, no constituye una estrategia rentable para la mayoría de las marcas. Se requieren avances tecnológicos, una mayor aceptación por parte del público y un marco regulatorio claro para que esta tecnología pueda tener un impacto significativo en el ámbito del marketing. Aunque el potencial a largo plazo del metaverso sigue siendo relevante, para muchos, la disminución de la realidad virtual y el interés decreciente en los dispositivos de realidad virtual están revelando la verdadera realidad del metaverso en la actualidad.