Por Redacción - 25 Marzo 2014
Los medios convencionales han encontrado en las redes sociales a su gran aliado. Un hecho que se ha materializado especialmente en el caso de laTelevisión, donde los usuarios recurren a las redes sociales 1 de cada 6 veces que se sientan a disfrutar de su programa favorito.
Según recoge el informe del Council for Research Excellence (CRE), aproximadamente la mitad de la actividad social se registra en torno a la programación televisiva. Los Social Media se han consolidado como la segunda pantalla. Para llegar a esta conclusión, el estudio se ha basado en el análisis de la actividad registrada en 78 mil app móviles por parte de 1.700 usuarios en Estados Unidos, durante 1.600 programas. El estudio fue realizado por el equipo de Keller Fay Group, en colaboración con Nielsen Life 360.
El perfil del espectador televisivo activo en las redes sociales es el de mujer (58%) con una media de edad de 35 años, quienes protagonizan la actividad social tanto en Twitter como en Facebook.
La gran noticia para la industria televisiva es que una vez más se confirma la eficacia de las redes sociales a la hora de atraer a la audiencia y mantenerla frente al televisor, especialmente en el caso de nuevos programas. El estudio indica que estos canales 2.0 duplican su efectividad a la hora de hacer crecer el interés ante nuevos programas (6,8%) frente a los ya existentes (3,3%). Asimismo, los Social Media registraron resultados hasta 3 veces superiores en el caso de las pronos de televisión, cuando se trata de dar a conocer nuevas propuestas televisivas.
Las redes sociales contribuyen tanto a la programación televisiva como al negocio publicitario que gira en torno a este medio de comunicación. Según Maheu, portavoz de Twitter, el 95% de esta actividad 2.0 en torno a la televisión tiene lugar en la plataforma de microblogging. Según los datos aportados en agosto por el portavoz de la empresa de microblogging, la segunda pantalla es ya una realidad consolidada. Los datos de Twitter indican que el 20% de los espectadores en Estados Unidos combina de forma habitual el uso de algún dispositivo inteligente frente al televisor. Se trata de una combinación perfecta que permite conectar con la audiencia en tiempo real y fomentar así el engagement.