Por Redacción - 4 Septiembre 2024
La red social Bluesky ha experimentado un crecimiento explosivo en Brasil tras la suspensión de X, anteriormente conocida como Twitter y ahora propiedad de Elon Musk, por parte de la Corte Suprema del país. En tan solo cuatro días, Bluesky ha sumado más de dos millones de nuevos usuarios, un incremento que ha llevado a la startup a enfrentar algunos desafíos técnicos debido a la sobrecarga en sus servidores, una situación que los ingenieros de la empresa han abordado con rapidez para mantener la estabilidad de la plataforma.
Este auge de usuarios ha impulsado a Bluesky a convertirse en la aplicación más descargada en Brasil, superando incluso a Threads, la alternativa ofrecida por Meta que fue diseñada para competir directamente con X. Según datos de la firma de inteligencia de aplicaciones Appfigures, las descargas de Bluesky en Brasil aumentaron un asombroso 1,018,952% durante el fin de semana, lo que refleja un fenómeno que trasciende las fronteras brasileñas y repercute en otros países. Estados Unidos, Portugal, el Reino Unido, Canadá y España se destacan como las naciones con mayor número de instalaciones fuera de Brasil, mientras que el crecimiento más acelerado se registró en Portugal, Chile, Argentina, Colombia y Rumanía.
El éxodo masivo de usuarios hacia Bluesky no solo ha sido cuantitativo, sino que también ha generado un notable aumento en la actividad dentro de la plataforma. Durante los últimos días, se ha observado un crecimiento significativo en el número de "me gusta", seguidores y reposts, indicadores clave que muestran la rápida adopción y participación de los nuevos usuarios en la red social. Bluesky, que hasta hace poco sumaba solo 26.000 nuevos usuarios semanales, ha visto cómo esta cifra se ha disparado a 2,4 millones en apenas cuatro días.
Este crecimiento vertiginoso de Bluesky no es solo una cuestión de números, sino que también pone de manifiesto la importancia de las redes sociales en Brasil, un país donde más de 144 millones de personas utilizan alguna forma de plataforma digital y que frecuentemente lidera las listas de países con mayor tiempo de conexión en línea. La repentina migración hacia Bluesky tras la prohibición de X subraya la volatilidad del mercado de redes sociales y los riesgos que enfrenta la plataforma de Elon Musk en uno de sus mercados clave. Con alrededor de 20 millones de usuarios activos, Brasil representaba el sexto mercado más grande para X, lo que hacía de este país una fuente significativa de ingresos publicitarios.
El atractivo de Bluesky entre los usuarios brasileños podría estar relacionado con la familiaridad que ofrece su experiencia de usuario, que recuerda mucho a la de Twitter antes de ser adquirida por Musk. Bluesky, que en sus inicios fue incubada dentro de Twitter y luego se independizó bajo la dirección de Jack Dorsey, uno de los cofundadores de Twitter, ha mantenido muchas de las características que hicieron popular a su predecesor. Estas incluyen "me gusta", "reposts", "citas de publicaciones" y perfiles de usuario, pero también ha introducido mejoras notables. Como una red descentralizada, Bluesky permite a los usuarios crear sus propias instancias, personalizar sus feeds y suscribirse a servicios de moderación de terceros, entre otras funcionalidades, lo que ofrece un grado de control y flexibilidad que plataformas como X no pueden proporcionar.
La centralización de X y la controversia en torno a su enfoque hacia la moderación de contenido parecen haber jugado un papel en la decisión de muchos brasileños de migrar a Bluesky, una plataforma que, al estar descentralizada, otorga a los usuarios más poder sobre las decisiones de contenido. Este modelo contrasta con la filosofía de otras redes sociales como Threads, que ha adoptado una postura más conservadora, evitando recomendar contenido político y centrando su enfoque en ser aceptable para marcas e influencers, con miras a la monetización a través de publicidad. En este contexto, la migración hacia Bluesky podría también reflejar el deseo de los usuarios brasileños de encontrar un espacio que no solo ofrezca la descentralización, sino que también mantenga el dinamismo y la estructura de Twitter en sus mejores días. Aunque otras plataformas descentralizadas como Mastodon también han visto un aumento en su número de usuarios, la escala del crecimiento de Bluesky en Brasil ha sido incomparable, lo que sugiere que los usuarios buscan algo más que la simple descentralización; buscan una experiencia que combine familiaridad, control y una comunidad activa y vibrante.
Bluesky ha demostrado en las últimas semanas que tiene el potencial de convertirse en una amenaza considerable para X, especialmente en un contexto global donde las redes sociales son plataformas vitales para la comunicación, la expresión política y el entretenimiento. Aunque todavía es pronto para afirmar categóricamente que Bluesky podría destronar a X a nivel mundial, varios factores indican que podría convertirse en un competidor significativo, especialmente si mantiene y amplía el impulso logrado tras su crecimiento explosivo en Brasil.
El caso de Brasil subraya la vulnerabilidad de X frente a crisis de confianza y problemas legales. La suspensión de X por parte de la Corte Suprema brasileña llevó a millones de usuarios a buscar alternativas, y Bluesky, con su estructura descentralizada y características similares a las de Twitter, se presentó como una opción atractiva. Esto demuestra que cuando una plataforma dominante como X se ve comprometida, existe un apetito sustancial por alternativas que puedan ofrecer una experiencia similar pero con mayor control y flexibilidad para los usuarios. Este tipo de crisis podría replicarse en otros mercados, especialmente en aquellos donde la libertad de expresión y la moderación de contenidos son temas sensibles.
Su enfoque en la descentralización, permitiendo a los usuarios crear sus propias instancias y personalizar sus experiencias, ofrece un nivel de autonomía que X, bajo el control centralizado de Elon Musk, no puede igualar. Esto es particularmente relevante en un momento en que la confianza en las grandes plataformas tecnológicas está disminuyendo, y los usuarios buscan cada vez más alternativas que les ofrezcan mayor control sobre sus datos y contenido. Además, la familiaridad de la experiencia de usuario de Bluesky, que recuerda a la época dorada de Twitter antes de su adquisición por Musk, puede atraer a los usuarios que sienten que X ha perdido parte de su atractivo original. Bluesky no solo imita las funciones básicas de Twitter, como los "me gusta" y los reposts, sino que también las mejora con características adicionales que podrían resultar especialmente atractivas para los usuarios avanzados. Esta combinación de familiaridad y mejora podría ser clave para atraer a un segmento de usuarios desencantados con los cambios en X.
Sin embargo, para que Bluesky pueda convertirse realmente en una amenaza global para X deberá demostrar que puede mantener la estabilidad técnica y la calidad de servicio a medida que crece su base de usuarios. La reciente afluencia masiva en Brasil puso a prueba sus servidores, y aunque los ingenieros lograron mantener la plataforma operativa, será crucial que Bluesky continúe mejorando su infraestructura para evitar interrupciones en el servicio.
Aunque Bluesky ha visto un aumento en las descargas en países fuera de Brasil, X sigue siendo la plataforma dominante en muchos mercados clave, y cambiar la lealtad de los usuarios no será tarea fácil. Para competir eficazmente, Bluesky necesitará expandir su presencia y adaptar su estrategia a las realidades locales de diferentes mercados. Además, la monetización y sostenibilidad a largo plazo de Bluesky también serán factores críticos. Mientras que X, bajo el liderazgo de Musk, tiene acceso a recursos financieros significativos y una estrategia clara de monetización, Bluesky aún está en una fase temprana de desarrollo y deberá encontrar formas de generar ingresos sin comprometer la experiencia del usuario. Esto podría incluir la creación de modelos de suscripción, publicidad no intrusiva o la implementación de servicios premium.
La evolución del panorama regulatorio global podría influir significativamente en la dinámica de competencia entre Bluesky y X. Las políticas de moderación de contenido, privacidad de datos y otras regulaciones tecnológicas están en constante cambio, y la capacidad de Bluesky para adaptarse a estas regulaciones de manera efectiva podría darle una ventaja competitiva sobre X, especialmente en mercados donde las grandes plataformas están bajo un escrutinio cada vez mayor.
