Por Redacción - 25 Noviembre 2024
Desde las elecciones presidenciales del 5 de noviembre en Estados Unidos, Bluesky ha experimentado un notable crecimiento, alcanzando los 21 millones de usuarios, con un aumento del 500% en su uso en ese país. Su diseño, similar al Twitter original, ha atraído a muchos usuarios que buscan una alternativa a la actual X de Elon Musk. En sus recientes entrevistas e intervenciones, Rose Wang, directora de operaciones de Bluesky, ha explicado las claves de este éxito y cómo la plataforma planea gestionar su rápida expansión.
Fundada en 2019, Bluesky nació con el objetivo de crear un protocolo para una plataforma similar a Twitter, pero con un enfoque en la escalabilidad. Wang resalta que, en su primer año, Bluesky ha superado en usuarios a plataformas como Instagram y Twitter, una tendencia única en el mundo de las redes sociales. La plataforma está diseñada para manejar cientos de millones de usuarios, y su equipo trabaja para garantizar que este crecimiento se maneje de manera eficiente.
Bluesky se basa en un protocolo descentralizado, lo que le permite ofrecer a los usuarios nuevas funciones y flexibilidad, a la vez que presenta una alternativa convincente frente a plataformas dominadas por algoritmos opacos. Mientras Musk tiene control total sobre X, que parece haber utilizado en beneficio de Trump, Bluesky otorga más poder a los usuarios y desarrolladores externos.
Bluesky optó por “clonar” prácticamente el diseño de Twitter porque su objetivo principal es crear una plataforma de microblogging familiar para los usuarios de Twitter que buscan una alternativa. Al replicar la interfaz de Twitter, Bluesky facilitó la transición de los usuarios de Twitter que ya estaban acostumbrados a ese formato, lo que hizo que la adopción de la plataforma fuera más rápida y natural. Además, la similitud en el diseño le permitió centrarse más en los aspectos fundamentales de su propuesta, como el protocolo descentralizado y la moderación colaborativa, sin tener que preocuparse por reinventar completamente la experiencia de usuario. Al mismo tiempo, la estrategia le permitió ofrecer una opción atractiva para quienes deseaban una red social más abierta, menos controlada por algoritmos centralizados y con un enfoque más en la comunidad.
Aunque a simple vista la plataforma puede parecer similar a X, Bluesky había alcanzado aproximadamente 13 millones de usuarios a fines de octubre. En solo dos semanas, superó los 21 millones, duplicando su base de usuarios en poco tiempo. Ante este crecimiento, Wang explica que Bluesky no estaba completamente preparada para este nivel de expansión. De hecho, la plataforma sufrió una interrupción a principios de mes debido a problemas con un proveedor de Internet, y para evitar más problemas, han aumentado la capacidad de servidores en sus centros de datos.
El crecimiento de Bluesky ha sido impulsado por dos factores: eventos en otras plataformas, como X, y el crecimiento impulsado por la comunidad, donde los usuarios se unen porque disfrutan de la interacción genuina. Wang menciona que aunque la infraestructura estaba lista, el equipo tuvo que adaptarse rápidamente para gestionar el aumento de usuarios.
El éxodo de usuarios de X, especialmente después de la elección de Trump y el giro más partidista de la plataforma, ha favorecido a Bluesky, que ofrece un espacio más neutral y centrado en la conversación. Bluesky permite a los usuarios interactuar sin ser manipulados por algoritmos centralizados, lo que contribuye a una experiencia más auténtica. Además, la plataforma apuesta por una moderación colaborativa, donde los usuarios pueden etiquetar publicaciones que infringen las normas, como las que promueven el odio o la desinformación, asegurando un entorno saludable.
Bluesky también enfrenta el desafío de la proliferación de bots en las redes sociales. Para combatir esto, ha implementado medidas como la verificación de texto y tecnologías para detectar granjas de bots. Los usuarios pueden denunciar actividades sospechosas, lo que permite respuestas rápidas y efectivas.
Por otro lado, a diferencia de otras plataformas, Bluesky ha optado por no basar su modelo de negocio en la venta de datos privados a través de publicidad invasiva. Aunque la plataforma es pública y abierta, lo que evita la comercialización de datos, están explorando modelos publicitarios menos intrusivos, suscripciones y una futura red de pagos para apoyar a creadores y desarrolladores.
Aunque actualmente cuenta con solo 20 empleados, Bluesky está contratando activamente. Wang menciona que, al igual que Instagram y WhatsApp en sus primeros años, Bluesky ha mantenido un equipo pequeño pero eficiente, lo que ha sido clave para su éxito. En el futuro, planean ofrecer suscripciones con beneficios como personalización estética y funciones adicionales para los usuarios. Con una visión clara y centrada en el usuario, Bluesky sigue consolidándose como una de las alternativas más prometedoras en el mundo de las redes sociales.