Por Redacción - 11 Septiembre 2023
Según los datos del último informe de infoadex sobre la inversión en medios, la televisión continua siendo el segundo medio por volumen de negocio, con una participación del 30,4% del conjunto de medios controlados disminuyendo 2,4 puntos frente al porcentaje que alcanzaba en 2021. Sin embargo, la bajada en inversión experimentada en este medio durante el año 2022 fue del -3,3%, situando su cifra en 1.731,8 millones de euros frente a los 1.791,7 millones del año anterior.
Sin embargo, existe otro dato aún más revelador. Según el Anuario de Audiencias de TV 2022, elaborado por Kantar, los españoles pasaron una media de 199 minutos al día (3 horas y 19 minutos) ante el televisor en 2022. Este dato supone un descenso de 4 minutos con respecto al año anterior. El consumo televisivo en España se ha ido reduciendo paulatinamente en los últimos años, debido a la aparición de nuevas tecnologías y plataformas de streaming, que ofrecen un mayor abanico de opciones al espectador. Sin embargo, la televisión sigue siendo el medio de comunicación más consumido en España, con una penetración del 79,5% de la población.
El consumo televisivo en España entre los jóvenes españoles de entre 16 y 24 años indica que pasaron una media de 150 minutos al día (2 horas y 30 minutos) ante el televisor en 2022. Este dato supone un descenso de 5 minutos con respecto al año anterior. Sin embargo, si seguimos rascando e indagando en otros datos y cifras, encontraremos según un estudio de la OCU, cómo los jóvenes españoles de entre 15 y 29 años pasan una media de 213 minutos al día en Internet. (10 minutos con respecto al año anterior). Por otro lado, según datos de Nielsen, los jóvenes españoles de entre 15 y 29 años pasan una media de 63 minutos al día en YouTube. Es decir, los jóvenes y no tan jóvenes dedican más tiempo a internet que a cualquier otro medio, y de este tiempo, una gran parte a visualizar contenidos en vídeo.
Utilizando una horquilla mayor de tiempo, podremos observar como por ejemplo en España, el tiempo medio de consumo de televisión se ha reducido en los últimos años de forma drástica, pasando de 226 minutos al día en 2010 a 150 minutos al día en 2022. Por otro lado, el tiempo medio de consumo de Internet ha seguido incrementándose en el mismo periodo, y todo indica que está tendencia seguirá en la misma dirección.
Y todavía hay más. Según un estudio de Barlovento Comunicación, los jóvenes españoles de entre 16 y 24 años dedican una media de 30 minutos al día a mirar la pantalla del móvil mientras ven la televisión. Este dato supone un incremento de 5 minutos con respecto al año anterior. Esto significa que, de los 150 minutos que dedican a la televisión al día, los jóvenes dedican un 20% a mirar la pantalla del móvil.
Todo ello refleja claramente las cambiantes tendencias de audiencia entre la televisión y el consumo de contenido en línea. En los últimos años, hemos sido testigos de un crecimiento exponencial en la preferencia por el consumo de contenido en línea, mientras que la audiencia de televisión tradicional ha experimentado una disminución notable. Esta tendencia se debe a una serie de factores, entre los que destaca la aparición de tecnologías innovadoras como el streaming, que proporcionan a los espectadores una mayor flexibilidad y una amplia variedad de opciones de contenido. Además, es evidente que las generaciones más jóvenes, que constituye un segmento clave de consumidores de medios, muestran una inclinación más marcada hacia el uso de Internet en lugar de la televisión como su principal fuente de entretenimiento y consumo de información.
Uno de los principales motivos por los cuales las nuevas generaciones prefieren no ver televisión tradicional es la disponibilidad de contenido en línea. Con la proliferación de plataformas de streaming como Netflix, Amazon Prime Video, Disney+ y YouTube, los jóvenes tienen acceso a una amplia gama de contenido a la carta. Esto les permite ver programas, películas y videos cuando les resulte conveniente, sin tener que seguir un horario de programación fijo. La flexibilidad y comodidad de estas opciones en línea a menudo superan a la experiencia de ver televisión en tiempo real.
Las plataformas de streaming y las redes sociales utilizan algoritmos para recomendar contenido basado en los intereses y preferencias del usuario. Esto significa que las nuevas generaciones pueden descubrir programas y videos que se adaptan a sus gustos específicos, lo que hace que la experiencia de consumo sea más atractiva y relevante para ellos en comparación con la programación de televisión tradicional que a menudo no tiene esta capacidad de personalización.
Los anuncios publicitarios también desempeñan un papel significativo en esta tendencia. La televisión tradicional generalmente incluye pausas comerciales con anuncios que pueden resultar molestos para algunas personas jóvenes. En contraste, muchas plataformas de streaming ofrecen opciones de suscripción sin anuncios, lo que elimina estas interrupciones publicitarias y mejora la experiencia de visualización. Sin embargo, hemos de destacar que a pesar de ser uno de los aspectos diferenciales más importantes, algunas plataformas como Youtube, pretenden emular aún más un modelo publicitario como el de la televisión, con pausas más largas aunque con menos anuncios.
El auge de los dispositivos digitales y móviles también ha influido en la preferencia por el contenido en línea. Las nuevas generaciones son conocidas por utilizar sus dispositivos móviles, como teléfonos inteligentes y tabletas, de manera constante. Estos dispositivos les permiten ver programas y videos de manera conveniente en cualquier lugar y en cualquier momento, lo que se alinea con su estilo de vida móvil y ocupado.
Además, las preferencias de entretenimiento han evolucionado. Las nuevas generaciones pueden estar más inclinadas a participar en actividades digitales interactivas, como interactuar en redes sociales, jugar videojuegos en línea o crear y compartir contenido en plataformas como TikTok. Estas actividades ofrecen una forma diferente de entretenimiento y participación que puede ser más atractiva para ellos que simplemente sentarse frente a un televisor.
El costo también es un factor relevante. En algunos casos, suscribirse a servicios de streaming puede ser más asequible que pagar por un servicio de cable o satélite, lo que hace que estas opciones sean más accesibles y atractivas para las nuevas generaciones, especialmente para aquellos que buscan opciones de entretenimiento económicas.
Es evidente que las nuevas generaciones tienden a alejarse de la televisión tradicional debido a la conveniencia, la personalización, la prevalencia de dispositivos digitales, los cambios en los patrones de entretenimiento y las consideraciones económicas. Aunque esto no significa que todos los jóvenes eviten por completo la televisión, prefieren opciones de entretenimiento que se adapten mejor a sus necesidades y preferencias individuales.