Que los terminales móviles son ya una extensión de nosotros y que ya no sabríamos vivir sin ellos es ya una realidad.
Atrás quedaron aquellos años en los que los dispositivos móviles eran privilegio de unos pocos. Hoy en día, cualquier persona, tiene un teléfono móvil a su alcance. Da igual en qué parte del mundo se encuentre. Estamos conectados continuamente y esa es una realidad ineludible. Si a esto le añadimos que, según los últimos estudios, en cualquier país desarrollado aproximadamente dos de cada tres usuarios tienen un teléfono inteligente, entonces el dato es más revelador aún si cabe. Y ésta es una realidad a la que la empresa actual no puede estar ajena, y mucho menos las PYME. La realidad ha cambiado, la forma en la que el usuario interactúa con el mundo es distinta, ahora ya no se trata de ver un anuncio por la calle o en televisión y días después acudir a la tienda. Actualmente si vas por la calle y ves una oferta interesante, apuntas con el móvil, vas a la página web y lo compras sobre la marcha. El móvil ha hecho que vivamos en el mundo de la inmediatez, en el mundo del ahora. Hoy más que nunca, podemos aprovechar cuando el cliente se encuentra más “caliente” para comprar sin tener que esperar que días después vaya a nuestra tienda a comprar. Para esto, tenemos muchas maneras de hacerlo.
¿Cómo podemos aprovechar el marketing móvil, para, por ejemplo, conseguir clientes durante estas navidades?
Imaginemos que nuestro negocio es una tienda online, que no tenemos tienda de calle. En estos días, las calles de todas las ciudades se llenan de personas en busca del regalo perfecto para sus seres queridos. Nuestro público está ahí, pero, ¿Cómo llegamos a ellos? y lo más importante: ¿Cómo lo hacemos a bajo coste? La respuesta es sencilla: con imaginación podemos combinar las últimas tendencias en marketing móvil, el código QR con lo más tradicional, la publicidad exterior.
Gracias a los códigos QR, que tan de moda se han puesto en los últimos meses, podemos redirigir a cualquier persona con un teléfono inteligente y conexión de datos a la web que queramos. Pero, ¿Cómo hacemos llegar estos códigos a la gente? Aquí la cartelería tradicional, los luminosos, los displays o los anuncios en marquesinas de autobuses o en cualquier otro medio físico serán nuestros mejores aliados, haciendo llegar nuestro mensaje a nuestro público allí donde se encuentre. Pero si queremos ser originales y creativos seguro que conseguiremos bajar los costes y subir el rendimiento de la campaña. Hace unos días, en un viaje por Irlanda, me sorprendió ver como en Dublín es habitual que las tiendas que no están situadas en las calles peatonales principales, coloquen a personas con carteles. Los famosos “hombre anuncio” con el nombre de la tienda señalando la dirección en la que se encuentra, de manera que se puede canalizar el tráfico de potenciales compradores hacia las mismas, ya que estas tiendas se encuentran fuera del flujo natural de los compradores en las calles peatonales.
Esto me dio una idea: ¿Qué nos impide hacer algo parecido con acciones de street marketing (flashmobs, actuaciones, conciertos callejeros, etc.) dirigiendo a través de un código QR, no a una tienda física, sino a nuestra tienda online. De esta manera, y con un bajo presupuesto, traeremos tráfico hacia nuestra web. Hacerlo simultáneamente en distintas calles principales, para poder analizar cuál de ellas es la que atrae más tráfico y de esta manera maximizar nuestra inversión a la vez que generamos tráfico de una manera poco convencional, original y a un coste muy inferior del de cualquier otro método publicitario. Tan sólo es necesario descargar el famoso CPM (coste por click) y ya podremos conseguir miles de visitantes a un coste muy bajo y efectivo, ya que captaremos a nuestros clientes justo en el momento en el que estén más dispuestos a comprar.
Por supuesto, esta estrategia debe de ir acompañada de una correcta usabilidad de nuestra tienda y de una oferta o producto lo suficientemente potente como para captar la atención del consumidor y que éste realice la compra, ya que, de no ser así, perderíamos potencia en nuestras acciones. Pero esta resulta una variable que, independientemente de las acciones que realicemos de captación de clientes, ha de estar maximizada y controlada dentro del proceso habitual de gestión de la tienda online.
Lancémonos al mercado con originalidad y con nuevas ideas, y el mercado nos recibirá con los brazos abiertos.