Por Redacción - 17 Mayo 2017
Si algo se ha repetido de forma recurrente en los últimos tiempos sobre lo que las empresas deben o no deben hacer a la hora de establecer una buena estrategia de marketing digital, es que no deben perder de vista al móvil. El móvil se ha convertido en un elemento fundamental de la vida de los consumidores y, como tantos análisis y estudios se han encargado de repetir, el que los consumidores lleven siempre consigo estos dispositivos ha impactado en cómo gestionan los procesos asociados a los mismos. El móvil es una extensión más y siempre presente en todos los procesos de relación con las marcas: los consumidores buscan en él información, lo emplean para comparar o lo usan para que su experiencia sea algo en lo que están también presentes sus amigos, conectando con ellos en tiempo real vía apps de mensajería. Y estos son solo unos cuantos ejemplos.
La importancia del móvil es tal que se da por hecho que las empresas le estarán dedicando recursos, atención y trabajo. Sin embargo, la realidad es un tanto diferente. Las compañías y sus responsables parecen haber comprendido la importancia que tiene pero, a pesar de ello, no le están dedicando toda la atención que merece.
De hecho, y como apuntan en Warc al hilo de un estudio que han realizado sobre la materia, el año del móvil (una de esas etiquetas que se han repetido una y otra vez en los últimos tiempos para decir que este era el momento del móvil) no solo ha llegado y se ha ido, sino que no ha conseguido cumplir con todos los objetivos. El móvil es cada vez más importante y más valorado, pero sigue existiendo un desequilibrio entre lo que se sabe y lo que se puede hacer y lo que se debería estar haciendo. Por todo ello, no todo el mundo está realmente listo para lo que el móvil supone y no todo el mundo está realmente preparado para lo que impondrá en el día a día de las marcas y empresas (o lo que, al final, está ya imponiendo).
El estudio ha preguntado a 700 miembros de la industria de Estados Unidos y de Europa como ven el móvil y cómo se ven ante él. Los datos del estudio son bastante preocupantes. De las agencias entrevistadas, solo el 6% está convencida de que sus clientes están preparados por completo para el móvil. El dato es ya por si solo una llamada de atención, pero lo es todavía más si se cruza con lo que piensa el otro lado de la situación. Si se pregunta a los propios responsables de marketing de las empresas lo que opinan, ellos no ven el panorama tan mal. Un 32% cree que está listo para el móvil.
¿Cuáles son los puntos en los que están zozobrando? El móvil implica muchos cambios y supone además tener que moverse por un terreno que es muchas veces desconocido. Esto obliga a asumir nuevas funciones y a contar con nuevos conocimientos, que son, justamente, lo que está fallando. Un 44% de los encuestados asegura que no están listos en lo que a adquisición de nuevos conocimientos para móvil supone.
Igualmente, también falla la estrategia, ya que quienes tienen una y una sólida son pocos. Un 65% de los ejecutivos de marketing de las empresas reconoce que no tiene una estrategia formal de marketing móvil para su marca y solo un 16% asegura tener una sólida y en marcha. Cuando se le pregunta a las agencias por lo que están haciendo sus clientes, el 58% denuncia que no tienen estrategia formal de marketing y que solo un 19% tiene una bien atada.
Y todos estos datos son realmente sorprendentes si se tiene en cuenta que los marketeros ven el móvil con buenos ojos. Un 80% de los encuestados apunta que el móvil es un canal bastante efectivo, una cifra llamativa si se tiene en cuenta que solo unos pocos tienen datos e información suficiente para establecer que lo es y mucho (12%). Esto es, los responsables de estrategia de marketing consideran que el móvil funciona bien, aunque carecen en realidad de la información sólida que les permita atestiguarlo.