Por Redacción - 16 Agosto 2008
El spam o publicidad no solicitada o sin permiso en teléfonos móviles se ha convertido en el punto de mira de los organismos responsables de la protección de datos.Por ello, La AEPD (Agencia Española de Protección de Datos) ha iniciado una nueva investigación de oficio con el objetivo de conocer los métodos con los que las compañías que envían mensajes publicitarios a teléfonos móviles obtienen los números a los que esta publicidad es emitida.El creciente mercado de la telefonía ha supuesto una nueva oportunidad y un medio directo para llegar con la publicidad de forma directa a los consumidores. Sin embargo, es bien sabido que ello esta siendo aprovechado por algunas compañías que recurren al spam publicitario o al envío de mensajes no solicitados.Al respecto, los últimos datos ofrecidos por el CIS (Centro de Investigaciones Sociológicas) reflejan que un 68,2% de los usuarios de teléfonos móviles españoles aseguran haber recibido alguna llamada o SMS con fines publicitarios de productos o empresas sobre la que no tenía constancia de haber dado sus datos. Ante todo ello el propio director de la AEPD Artemi Rayo, explicaba la respuesta con la que este tipo de empresas intenta evadir las sospechas sobre este tipo de técnicas, alegando que la mayoría de ellas responden que estas acciones son realizadas de forma aleatoria por lo que no puede decirse que existan datos personales en riesgo. La propia ley de protección de datos esclarece que estos datos personales sólo pueden ser utilizados para el fin que se han solicitado y ello no implica que por esta razón debamos recibir sms o mensajes publicitarios aunque la propia ley prevé que si existe una relación comercial previa, la empresa puede ponerse en contacto con sus clientes y esto es sin duda un aspecto sobre el cual se apoyan muchas compañías para desarrollar lo que se llama "marketing móvil. También el Ministerio de Sanidad y Consumo actuará por la vía judicial contra aquellas operadoras de telecomunicaciones que lleven a cabo "spam telefónico" o publicidad no solicitada.Con esta medida se intenta evitar que las compañías de telecomunicaciones lleven a cabo este tipo de prácticas y para ello será enviado un comunicado con carácter disuasorio a las principales operadoras para informarles de la ilegalidad del "spam", y de que se considerará publicidad agresiva e infracción grave o muy grave en la nueva normativa que el Ministerio tiene previsto desarrollar cuando exista reincidencia.