Tenía que decirlo. Y siento que el titular de este artículo sea especialmente explícito para describir el sentimiento experimentado cuando el tradicional anuncio Lotería de Navidad de 2023 comenzaba a viralizarse a lo largo del día.
El nuevo anuncio, titulado "La suerte de tenernos", parece ser otra entrega en la larga tradición de historias tristes y melancólicas que la Lotería ha adoptado en los últimos años. Este enfoque narrativo, que busca apelar a las emociones más profundas del espectador, plantea preguntas sobre la verdadera esencia de un anuncio navideño. El título en sí mismo, sugiere que la única suerte real en la vida es tener a los seres queridos. Pero, ¿por qué la Lotería de Navidad insiste en vincular esta suerte a situaciones de dolor y sufrimiento? ¿Es acaso la única manera de transmitir el valor de la conexión humana?
En el extenso anuncio de más de tres minutos, se narra la historia de Bea, una joven a quien su padre le encomienda la compra de un décimo de la Lotería de Navidad. Sin embargo, entre el ajetreo, las prisas y las responsabilidades diarias, al llegar a casa de noche y tras recibir la llamada de su padre indagando por el décimo, la protagonista confiesa haberlo olvidado. Poco más hay que agregar.
Entre los comentarios, se leen críticas como: "Hasta Suchard ha superado ampliamente a este anuncio", "En Navidad, hay miles de anuncios mejores que este, que celebran la familia, el amor...", "Otros años fue mucho mejor; este año se queda corto" o “Escaso espíritu navideño y en su lugar, ¿Qué tal si desapareciéramos?". También hay quienes lo han apreciado por supuesto, pero yo no estoy aquí para seguir tendencias o corrientes virales y silenciar lo que muchos piensan pero pocos expresan. Respetando las opiniones de todos, simplemente quiero señalar que estas historias "empalagosas" me resultan cansadas en un momento en el que lo que más necesitamos es felicidad y alegría.
La atmósfera del anuncio, que se desarrolla en un entorno invernal con una música triste y melancólica, intensifica la sensación de nostalgia y pesar. ¿Por qué la Lotería de Navidad vincula la temporada festiva con un ambiente tan melancólico? La Navidad, por tradición, es un periodo de celebración, alegría y esperanza, no un momento para sumergirse en la tristeza. Parece que el enfoque utilizado para presentar esta nueva historia se repite, siguiendo una fórmula típica de publicitarios con aspiraciones de directores de cine.
La reiteración de este enfoque plantea la interrogante de si la marca está desaprovechando la oportunidad de comunicar un mensaje más positivo y esperanzador durante una temporada que, por naturaleza, debería ser optimista. En lugar de utilizar la ocasión para difundir alegría y esperanza, la Lotería de Navidad parece aferrarse a la idea de que solo a través del sufrimiento podemos realmente valorar la fortuna de tener a nuestros seres queridos. Este enfoque podría distanciar a aquellos que buscan un respiro de las dificultades cotidianas durante la temporada navideña, y eso es comprensible. Sin embargo, personalmente, preferiría que, en lugar de recordarnos nuestras penas y dramas constantemente, afrontemos estos momentos con un toque más de alegría. Después de todo, un anuncio publicitario no va a cambiar nuestra vida.
