Por Redacción - 8 Junio 2015
Corren malos tiempos para los sitios web que tengan anuncios intersticiales. Y es que Google planea configurar este formato de anuncio de pantalla completa como factor negativo de integración en su algoritmo. Una muestra más de que al todopoderoso buscador no le gustan estos formatos de anuncios, motivo por el que ha decidido castigar el contenido, tanto en las búsquedas a través de escritorio como a través de los dispositivos móviles.
La noticia fue dada a conocer por Maile Ohye, miembro del staff de la compañía, durante su intervención en la última conferencia SMX Advanced. Un evento en el que aprovechó para adelantar a los websmasters allí congregados que desde Google esperan poner medidas al respecto a este formato de anuncio, para la mayoría de los usuarios molesto e intrusivo.
En concreto, Maile Ohle señaló que "los interstitials son malos para los usuarios". Un motivo de peso para que la compañía de la que forma parte se esté planteando la posibilidad de castigar a través de su buscador, y con clara influencia en el posicionamiento web, a aquellos contenidos que se encuentren por detrás de este formato de anuncio que configuran los intersticiales.
Pero, ¿en qué consisten estos anuncios en concreto? ¿Qué es lo que les hace tan diferentes al resto? Y fundamentalmente, ¿por qué molestan a los usuarios de manera directa? Los anuncios interstitials se caracterizan por plantear un mensaje a pantalla completa, que en el momento en el que son proyectados dificultan al 100% la posibilidad de que el usuario pueda continuar con la actividad que en ese momento está llevando a cabo.
De ahí que los internautas se queden de esta modalidad de publicidad, que tachan de avasalladora e intimidatoria a sus navegaciones respectivas. Y una oportunidad de generar en Google un movimiento para limitar este tipo de contenidos, que los usuarios reconocen querer tenerlos cada vez más alejados de sus pantallas.
Funciones de los interstitials
En este sentido, también hay que tener en cuenta las funciones que este tipo de contenidos genera en los anunciantes, las fuentes a través de las cuales se decantan por llevar a cabo esta modalidad de publicidad tan controvertida.
Así, a pesar de que en muchas ocasiones tanto las páginas webs de escritorio como los dispositivos móviles utilizan estos anuncios de carácter interstitial para redirigir al usuario al enlace de descarga de una app móvil, la mayor parte de las páginas los utilizan con el objetivo de monetizar al máximo estos contenidos, ya que fuerzan al internauta a ver los anuncios o los vídeos incluso antes de acceder al contenido que les interesa.
Posturas divergentes
Es por ello que a nadie debe extrañarle la existencia de dos posturas divergentes en lo relativo a este formato de anuncio. Así, desde el punto de vista de los usuarios suponen una molestia en su navegación, la cual puede ser menguada por la decisión de Google a la hora de castigar estos contenidos. Una buena noticia para los internautas que desconocemos cuanto tiempo tardaría en aplicarse, ni cuál sería el castigo específico que recibirían los anunciantes responsables de los mismos.
De hecho, para los publicistas esta decisión supondría la puesta en marcha de una guerra contra esta fórmula de anuncios, que puede generarles una auténtica limitación, ya que deberán sacrificar sus ventajas financieras a nivel de ingresos en pos de un mantenimiento en posicionamiento web a través de otras modalidades de publicidad online.