Por Redacción - 27 Octubre 2022
En el universo de la publicidad online, ha habido – durante años – dos grandes jugadores. Google y Facebook se ha repartido el grueso del mercado, dejando para los demás players las migajas. Sin embargo, las cosas están cambiando. El crecimiento de algunos nuevos nombres, como es el caso de TikTok, han llevado a que la inversión publicitaria pivote.
Pero, además, también están apareciendo nuevos players que quieren llevarse una parte de la tarta publicitaria. A Amazon le salió bien, convirtiéndose en el tercer gran nombre global de la publicidad, pero otros quieren seguir sus pasos y hacerse con ingresos publicitarios. El ejemplo de Netflix es el más cercano y casi más evidente, pero está lejos de ser el único. Apple es, sorprendentemente, uno de los nombres emergentes y su historia está llena de movimientos calculados. No hay que olvidar que sus cambios en privacidad en el iPhone cambiaron por completo el mercado publicitario online, siendo la propia compañía la gran beneficiada.
Ahora, Apple está ampliando dónde y cuándo sirve anuncios, encaminada a ser uno de los grandes imperios publicitarios del no tan lejano mañana. Hace unos meses, Apple estaba doblando su personal de su división publicidad. A día de hoy, sus apuestas parecen más encaminadas que nunca.
Más allá de los rumores que señalan que la publicidad llegará a Apple TV+, su servicio streaming (y al que acaba de subir tarifas), el crecimiento de los espacios publicitarios en el universo Apple es ya un hecho. Esta misma semana, la cantidad de anuncios que incluye su App Store ha crecido. La pestaña Hoy y las apps relacionadas se han abierto a los anuncios. Son más espacios publicitarios, más potenciales ingresos y, esto no tan positivo, más dolores de cabeza reputacionales.
Estos primeros días con más anuncios han demostrado que el efecto ha sido el crecimiento de la publicidad de apps de casinos y casas de apuestas, como publica Applesfera, algo no muy recomendable a nivel reputacional (por ahora, esto es lo que se está viendo en los mercados en los que Apple ya ha activado los anuncios y no en España, donde este tipo de publicidad está regulada por ley y donde Apple aún tiene su apuesta publicitaria por activar).
Igualmente, la entrada de Apple en el mercado de la publicidad tiene daños colaterales. Más allá de los euros de inversión que se llevará – y que antes iban a sus rivales – está la cuestión de cómo cambia las cosas para quienes dependen de sus terminales para llegar a sus consumidores. Sus normas de privacidad ya hundieron a Facebook o lastraron al email marketing, pero ahora sus nuevos cambios golpearán aún más a esos players.
Las nuevas normas de uso de las compras in-app (y para descargar las apps de las redes sociales hay que pasar por la tienda oficial de Apple) considera que los posts y contenidos patrocinados son también compras hechas dentro de la aplicación, por lo que se quedará con un 30% de comisión en las ventas. El principal golpeado por esta decisión es Meta (la empresa dueña de Facebook o Instagram), que tiene en este tipo de promociones una fuente de ingresos crucial.
En declaraciones a The Verge, han lamentado que Apple esté haciendo crecer su negocio dañando a otros "en la economía digital". De hecho, lo que se teme dentro de la compañía, según el medio estadounidense, no es tanto el efecto que esto tendrá (se limitará a lo que ocurre cuando un usuario da a sí, quiero impulsar este post o patrocinarlo) sino que siente un precedente para que Apple aplique estas condiciones a todas las ventas in-app de publicidad.
