¿Has leido la pregunta del título? Pues te voy a dar tres respuestas posibles:
1.Siempre2.Nunca3.En algunos momentos (Redes Sociales, Networking, Hablando en Público,…)
Te daré una pista. Hay una respuesta correcta, otra incorrecta y otra a medias.
Pues bien, si has elegido la opción 1, has acertado. Si has elegido la 2, tienes un aprobado. Y si has escogido la 3 estás suspendido.
¿A qué viene esto? Pues a algo muy sencillo. Aunque quizás existan, en ninguna de las empresas en las que he estado recuerdo que hubiese un departamento específico de Branding o de gestión de la marca. Además, creo que sería absurdo dejar la marca en manos de un comité. Si alguien cree que la marca es algo que pueda ser gestionado por una persona o por un equipo de sesudos consultores o profesionales se equivoca.
Lo he dicho muchas veces, la marca no es algo que se tenga o que se pueda crear o guardar. La marca es la percepción que se genera en la mente de las personas como resultado de acciones, reacciones y comportamientos. Por lo tanto, pensar que una marca es un logo, un color o una Fan Page en Facebook es absurdo y peligroso.
Las grandes marcas comerciales lo son porque durante años, mucha gente ha trabajado de un modo concreto, coherente y consistente. Una marca fuerte lo es porque los distribuidores, la persona que está en recepción, el contable, la de compras o el gestor de punto de venta han hecho las cosas bien o mejor dicho, muy bien. Y seguramente no tienen ni idea de como se llama el color que hay en el fondo del logo de su empresa, ni puñetera falta que hace.
Por lo tanto, la marca es el resultado de una forma de entender un negocio y de un modo de hacer las cosas.
Con una Marca Personal ocurre exactamente lo mismo. Si piensas en las grandes Marcas Personales de la historia, desde Jesucristo a Nelson Mandela, desde Alejandro Magno a Gandhi, dudo mucho que alguno de ellos se preocupase de gestionar su Branding Personal.
Si estas personas han dejado una huella imborrable a lo largo de la historia ha sido porque sus objetivos, sus valores y sus actos eran coherentes. Es cierto que si todos ellos han llegado a tanta gente es porque hubo quienes se encargaron de comunicar y transmitir lo que hicieron. Pero lo que vemos en el Evangelio o en las biografías de esas personas es la plasmación (más o menos real) de las acciones que definieron su Marca Personal.
Por eso digo que una Marca Personal es algo que SIEMPRE forma parte de nosotros. No es algo que se pueda crear, sino más bien algo que se descubre y se desarrolla.
Creo que podría aceptarse con reservas que una Marca Personal NUNCA se gestiona. En realidad, si tienes claras algunas cosas, no debes preocuparte del Branding Personal porque ya vas con el piloto automático. Si tienes bien definidas tus prioridades, tus metas y tu valor, puedes ir por la vida sin tener que pararte a cada momento a tomar una decisión.
Puedes decirme que el Networking, las Redes Sociales o la visibilidad de cualquier tipo es Branding Personal pero yo no lo entiendo así. Eso es Marketing Personal, es la forma que tienes de comunicar y dar a conocer tu Marca Personal. El que no te conozca nadie o tengas millones de fans no debería influir en la forma o profundidad de la huella que dejas sino en el número de personas en las que la dejas.
Hay quien me dice que el Branding Personal requiere mucho tiempo y esfuerzo. Pero eso es falso. Lo que absorbe tiempo y esfuerzo es la comunicación, no la propia Marca. En realidad, eso sería como decir que ser uno mismo requiere mucho trabajo (como dice la filósofa Pataky).
Por lo tanto, si quieres tener una Marca Personal fuerte, preocúpate de conocerte bien, de establecer tus límites y tus prioridades, de tratar de ser el mejor en lo tuyo y a partir de ahí podrás olvidarte de gestionarla porque todo lo que hagas y comuniques dejará tu sello, huella o marca.
Podríamos sospechar que quienes se obsesionan por gestionar artificialmente la imagen que transmiten (no su marca) es porque tienen algo que ocultar y no pueden comportarse de un modo auténtico y honesto (cualidades de las Marcas Personales fuertes).