Por Redacción - 12 Septiembre 2019
En los últimos meses, varias marcas y empresas con historias bastante largas y con identidades bastante reconocibles se han lanzado a hacer un reajuste en su branding y han presentado nuevas versiones - con diferentes grados en la escala de más o menos cambiadas - de sus logos. La última en sumarse a la tendencia del cambio ha sido Volkswagen, que acaba de presentar su nuevo logo.
La compañía ha presentado el logo en la feria de automoción que se ha celebrado en Frankfurt y lo ha metido en el saco de una suerte de nueva identidad de marca, el New Volkswagen. "El nuevo diseño de marca señala el comienzo de una nueva era para Volkswagen", señalaba Jürgen Stackmann, ejecutivo de la compañía responsable de ventas y marketing, en la nota de prensa de presentación. La empresa es una más de las compañías de automoción que están renovando su imagen corporativa para unirla al coche eléctrico (que es lo que ellos mismos señalan que será su futuro). Esta visión de futuro requiere un reposicionamiento de marca.
Según la descripción que la propia Volkswagen ha hecho de su nueva imagen de marca, es "más moderna y más auténtica". Su logo es ahora una imagen plana y en dos dimensiones. La compañía cree que es más clara y que se queda con los elementos más esenciales de su identidad. El logo minimalista es tendencia y la compañía es la última que se ha sumado al cambio en esa dirección.
Igualmente, han reajustado el tono de azul que emplean, encajando con la idea que venden de que su imagen será ahora un poco más colorista y más atrevida.
También creen que el cambio de imagen les permitirá ser más flexibles con sus logos y que funcionará mejor en el entorno digital. Este último punto es especialmente relevante porque la empresa quiere posicionarse de un modo más sólido en la e-mobility y quiere venderse como una compañía digital-first.
El cambio, que va bastante en línea con lo que ha estado haciendo el mercado en lo que a diseño de logos se refiere, no solo es interesante por su condición de rebranding y reajuste de las cosas, sino también porque entra dentro de otra cuestión que se ha convertido en emergente. Volkswagen no ha encargado a nadie que le hiciese el trabajo: el rebranding de la compañía se ha hecho in-house.
La compañía lo explica como uno de los puntos clave en su presentación de su nueva identidad. El trabajo ha estado en manos de un "equipo conjunto" de sus departamentos de marketing y diseño, que han sido quienes han determinado cuáles son los puntos estratégicos claves de su nueva identidad de marca. Para el diseño final y su implementación, integraron a todos los departamentos de la compañía para trabajar en ese terreno.
El papel de las agencias llegó después, con la parte menos estratégica de llevar esa idea a una ejecución final. Para ello, Volkswagen empleó 19 equipos internos pero también a 17 agencias externas. Diseñar, perfilar y ejecutar la nueva identidad corporativa les llevó así nueve meses de trabajo.
Además, Volkswagen también se suma a una de las nuevas corrientes en logos que están marcando el diseño de marca en los últimos meses. La compañía también va a tener un logo sonoro, "por primera vez". Como explican desde la propia empresa, quieren con ello que su marca tenga también una identidad acústica diferenciada y distintiva, "tanto en los vehículos como en las comunicaciones".
El logo sonoro se ha convertido en una de las grandes últimas tendencias en branding. Varias grandes compañías han presentado o cambiado sus identidades acústicas en los últimos meses, intentando posicionarse en un entorno que consideran que cada vez será más importante.
No es el único, por otro lado, cambio que Volkswagen hará en su identidad sonora. Habitualmente, la compañía usaba tanto en publicidad como en la presentación de sus productos voces masculinas. Ahora va a cambiar a una voz femenina "en casi todos los mercados". Será una voz "cálida, agradable y segura" de mujer.
La nueva imagen de marca ya se ha añadido a algunos diseños de vehículos y elementos corporativos, pero irá siendo añadida de forma general a los demás puntos de la empresa. Volkswagen espera haberla implantado por completo a mediados de 2020.
Eso sí, a los críticos el movimiento no les ha acabado de convencer. Como apuntan en uno de los análisis que se han hecho desde dentro de la industria, no es un logo malo, pero no tampoco es del todo perfecto. Es, señalaban, un poco raro.