Por Redacción - 24 Septiembre 2019
Como una década atrás, las noticias de tecnología tenían muy presente a Yahoo. El entonces más o menos gigante estaba sumido en un tira y afloja para una posible compra por otro gran player tech (Microsoft fue el que más cerca estuvo) y, después, en una sucesión de directivos que llegaban con grandes planes para reflotar la compañía y que no lo lograban.
El último de sus grandes fichajes fue el de Marissa Meyer, que robaron a Google y sobre la que había muchas esperanzas depositadas. Pero Yahoo no logró remontar y, la que había sido la gran compañía de internet a principios del siglo, se fue quedando cada vez más difuminada en la lista de players online. Su posición en el mercado publicitario online global, por ejemplo, se fue haciendo cada vez menos relevante.
Pero Yahoo sigue existiendo y sigue operando, buscando recuperar su posición en el mercado online y conectar con los consumidores. Uno de sus principales riesgos, eso sí, es el que esos consumidores olviden que ellos están ahí y que la compañía sigue queriendo convencerlos. ¿Puede un rebranding servir para al menos recordarles que están ahí?
Yahoo ha cambiado presentado nuevos productos y ha renovado su logo. "Nuestro logo es solo un signo de cambios más grandes y más importantes en marcha", señalan en la presentación del nuevo logo.
El nuevo logo es más morado y usa algunos de los elementos que se han visto en diseño de logos en los últimos años, como es el tipo de tipografía. Como explican en The Verge, el logo es obra de Pentagram, la misma agencia que ha diseñado algunos logos sans-serif que han tenido bastante eco en el mercado estadounidense. La compañía usa su punto de exclamación característico para intentar dar movimiento al logo y para que parezca más llamativo. La agencia responsable creen que le da un "sentido de momento y emoción".
El logo es la segunda actualización que hace la compañía en unos pocos años. El anterior rediseño es de 2013 (y algunos medios estadounidenses señalan que el anterior tenía más vida), aunque el actual no bebe de él. Los responsables del rediseño explican que intentaron conectar el nuevo logo con el que la compañía tenía en 1996, aunque haciendo que sea más "geométrico y compacto".
Quieren que el logo actual se asocie, como ocurría con el primero, con el sonido que podría hacerse si se exclamase el nombre de la empresa. "Como con el logo original, la nueva identidad captura la voz de una marca bautizada como una exclamación de alegría y descubrimiento, y todavía parece como si pudiese ser gritada o cantado a la tirolesa, ¡yahooooooo!", señalan.
¿Servirá todo esto para reposicionar a la marca? Como apunta un analista a AdAge, el cambio es un movimiento de Yahoo para intentar adecuarse a la realidad de este momento y a sus competidores.
La competencia, recuerda, no va a desaparecer, sino que más bien parece que está ocupando una posición más sólida y más estable. "Yahoo se enfrenta a un momento existencial y su respuesta es plantar una nueva bandera", apunta. Por supuesto, un logo no supone nada si por detrás no hay cambios reales en lo que a productos y servicios toca.
Yahoo no es la primera marca que intenta hacer borrón y cuenta nueva reformando su imagen visual e intentando reposicionarse ante los consumidores, recordando que están ahí y que tienen algo que vender. A las empresas a las que les funcionó este movimiento fue porque más allá del logo tenían una sólida estrategia de cambio para acompañarla.