Por Redacción - 7 Noviembre 2017
Los contenidos se han convertido en los últimos tiempos en la gran arma secreta (o quizás no tan secreta) de las marcas y de las empresas. En los últimos años, la estrategia de marketing ha estado cada vez más centrada en producir contenidos y en hacerlo además de una forma moderna, nueva.
Es la era del marketing de contenidos, en el que no se está creando simple spam corporativo sino que se están generando contenidos de valor añadido. El marketing de contenidos no es simplemente publicar publirreportajes en las webs propias o en los medios que permiten llegar a la audiencia interesada, sino que supone crear contenidos de valor, de calidad y que conectan con los consumidores a otro nivel.
El interés creciente por los contenidos se puede ver en los movimientos que las compañías han hecho. Las empresas han contratado a expertos y han creado en algunos casos sus propias plantillas de trabajadores centrados en ellos (las grandes multinacionales están probando a contar con sus propias redacciones, por ejemplo). También han empezado a comprender el valor que tienen los contenidos y la necesidad de centrarse en colaborar con socios que sepan lo que realmente importa. Y, por supuesto, los marketeros han situado ya a los contenidos en una parte destacada de sus presupuestos.
La industria del marketing de contenidos mueve ya mucho dinero y más que moverá, según apuntan las previsiones, de aquí al futuro inmediato. Según los resultados de un estudio de Technavio, el mercado global del marketing de contenidos está creciendo a un ritmo del 16%.
Así, en 2016 la industria se valoraba en unos 195.580 millones de dólares. En 2021 esa cifra estará más que superada y el mercado habrá alcanzado ya una cantidad muy superior. De hecho, se espera que en 2021 la industria mueva en todo el mundo unos 412.880 millones de dólares, unos 217.300 millones de dólares más de los que vende ahora.
"La efectividad del marketing tradicional está cayendo cada día", explica Ujjwal Doshi, lead analyst en Technavio, a The Drum. A medida que esto va cayendo, el marketing de contenidos se va convirtiendo en más y más atractivo y sobre todo en la alternativa más poderosa para convertirse en algo efectivo.
El mercado y la industria del marketing de contenidos va a crecer mucho, eso ha quedado claro, pero ¿qué es lo que hará que crezca?
Por un lado, están los costes. Frente a la publicidad tradicional, como es el caso de los anuncios, el marketing de contenidos tiene un precio de entrada mucho más bajo. Publicar contenidos sale, en definitiva, mucho más barato que hacer un anuncio de unos cuantos minutos para la televisión.
Por otro lado, está lo que se consigue y lo que las marcas esperan. El marketing de contenidos se empleará de forma recurrente en los próximos tiempos (y ahora) para mejorar el reconocimiento de marca. "El marketing de contenidos es la más económica y efectiva de las maneras de construir reconocimiento de marca entre los consumidores", recuerda el experto de Technavio, señalando que para los consumidores si pueden confiar en la marca como fuente de información suelen sentir que también pueden confiar en ella como fuente de productos de consumo.
Y, finalmente, los marketeros lo emplearán más porque están viendo resultados. A medida que el ratio de conversión aumenta, el marketing de contenidos se va viendo como una alternativa cada vez más atractiva y se está apostando más por ella.