Por Redacción - 16 Septiembre 2019
Cada año en el que se celebra un Mundial de Fútbol, los presupuestos publicitarios crecen, el gasto aumenta y el evento funciona como un elemento de tirón para el mercado publicitario. Eso sí, eso ha ido ocurriendo edición tras edición con el Mundial de Fútbol masculino.
Este verano, sin embargo, el Mundial que se celebraba era el de fútbol femenino y, mucho más que en años anteriores, los medios dieron cobertura, las audiencias prestaron atención y las marcas se lanzaron a la inversión. Las grandes marcas apostaron este año más que nunca por el fútbol femenino, respondiendo así a los cambios en el mercado pero también porque esperaban que este año tuviese más audiencia y despertase más interés entre los consumidores/espectadores.
Los datos del mercado estadounidense dejan muy claro cómo el tirón del fútbol femenino está creciendo entre marcas y empresas. Las estimaciones de cierre de cuánto dinero movió el Mundial de Fútbol femenino este verano muestran una tendencia al alza y superan todo lo que se esperaba.
Kantar estimaba, en un primer momento, que el campeonato supondría un gasto solo en publicidad de 43 millones de dólares. Ahora, sin embargo, la firma de análisis ha ajustado las cuentas y ha doblado la cantidad. Según sus valoraciones, las marcas y las empresas se dejaron en anuncios relacionados con la emisión un total de 96 millones de dólares.
Las cantidades son limitadas al mercado de EEUU, pero demuestran el potencial creciente del deporte en lo que respecta a su tirón entre marcas y empresas (y también cómo una selección bien posicionada - EEUU fue la ganadora - impacta en el gasto). El tirón fue tan elevado que Fox, la cadena que emitía en inglés los partidos, vendió, como explica un directivo de la industria publicitaria a The Wall Street Journal, todas las impresiones publicitarias que podía vender.
Y, aunque las cifras siguen siendo más bajas que el fútbol masculino (a pesar de que en EEUU sus jugadoras son campeonas mundiales y sus jugadores no lo son), la industria está viviendo un "despertar" en relación al fútbol femenino, como señalaba un directivo al Journal.
Y ese despertar está lejos de ser solo algo que ocurra en el mercado estadounidense. El tirón del Mundial y el eco que ha tenido en medios y redes sociales han tenido un efecto arrastre en la cobertura mediática, en la atención que genera entre los espectadores y en el interés de las marcas y empresas a un nivel mucho más global.
De hecho, el impacto del renovado interés por el fútbol femenino como motor de posicionamiento para marcas y empresas se puede ver también en lo que ocurre en España. Durante el verano, el fútbol femenino se convirtió en un tema recurrente en las secciones deportivas de los diferentes medios y también en un elemento que los clubes de fútbol tradicionales estaban potenciando.
La compra del CD Tacón por para del Real Madrid se convirtió en una de las grandes noticias futbolísticas del verano y en uno de esos temas que interesaban a marcas y empresas. La adquisición, explicaba a Expansión, Xavi Bové, consultor de marketing deportivo, el pasado julio "atraerá patrocinadores locales y globales y contribuirá a poner en valor los beneficios de invertir en fútbol femenino".
La Asamblea General Ordinaria de Socios Compromisarios del Real Madrid acaba de aprobar la absorción del equipo (que le saldrá por 300.000 euros), que pasará a llamarse Real Madrid Femenino a partir de la próxima temporada. "El fútbol jugado por mujeres es una realidad incontestable. Viene creciendo de forma espectacular y el Real Madrid debe formar parte de ello", señalaba el máximo responsable del Real Madrid, Florentino Pérez, al hilo de esa decisión.
El movimiento es uno más de los que los grandes equipos están haciendo para asentarse en un terreno emergente, más visible que en el pasado. De hecho, la presentación de la liga de este año se hizo por todo lo alto. La nueva liga tiene patrocinador (Iberdrola, por 4 millones de euros de inversión, según apunta la prensa deportiva), presentación llamativa y tirón.
Y quizás si hay una prueba de que el deporte despierta más interés en términos de impacto de marcas está en que al fútbol femenino también ha llegado la batalla de las teles: el fútbol femenino está protagonizando una batalla por determinar quién tiene derecho a retransmitir los partidos de fútbol, si es para Mediapro (que pagó 9 millones de euros a la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino hace unos meses) o si es la Federación Española de Fútbol (responsable de la renovada liga) la que puede comercializar esos derechos