Por Redacción - 13 Mayo 2020
El parón por el confinamiento ha tenido un efecto directo en el universo de los deportes y en el marketing deportivo asociado. Las grandes competiciones deportivas han tenido que pulsar el botón de pausa y eso ha implicado no tener partidos, no tener material para emisiones deportiva y, por supuesto, no tener espacios para la publicidad deportiva. El parón ha afectado, por tanto, a varias industrias vinculadas.
Las fases de desescalada para salir del confinamiento han marcado ya una agenda de lo que nos espera en el futuro inmediato, pero no han puesto todavía una fecha específica para la vuelta de las grandes competiciones deportivas. En algunos países, algunas ligas se han dado ya por cerradas y completadas. En otros, esperan volver aunque a puerta cerrada.
Eso es lo que pasará en España con el fútbol. LaLiga arrancará el 12 de junio de vuelta en España (o como muy tarde el 19, la otra fecha alternativa que barajan). Al menos, eso es lo que los organizadores esperan y lo que está ya tomando los clubes de fútbol como referencia (por ahora, eso sí, el Ministerio de Sanidad no ha dado el visto bueno definitivo a esta fecha).
Esto implica la vuelta a los entrenamientos, pero también empezar a pensar cómo será el fútbol post-coronavirus. Porque, aunque la competición vuelva, tendrá que hacerlo siguiendo todos los protocolos de seguridad sanitaria posibles y, por tanto, sin público para evitar la aglomeraciones.
Como máximo, solo podrán estar 230 personas en el interior del estadio, en zonas separadas e independientes entre sí para los profesionales necesarios para que se pueda desarrollar la actividad. Cada zona estará precintada y será desinfectada y para entrar habrá que estar en una lista previamente remitida por los clubes (y dejar que te tomen la temperatura).
¿Cómo afectará todo esto a la publicidad y a la experiencia de retransmisión? Si los partidos se juegan a puerta cerrada, no habrá público en las gradas. No habrá nadie que anime, por supuesto, pero tampoco nadie que llene esos huecos y que llene la imagen que se verá por televisión. Esto crear una cierta imagen vacía, algo que LaLiga no quiere.
Los propios responsables de LaLiga han reconocido que quieren evitar el eco o "la vista horrible de los sitios vacíos". También cambiarán los tiros de cámara y están incluso hablando con los responsables de EA Sports, sobre ideas sobre cómo emitir los partidos de forma diferente.
Para evitar esa imagen vacía, van a recurrir a la propia publicidad. Entre los planes está el de tapar las gradas vacías (lo están haciendo en otros países con otras competiciones) o el de meter en ellas contenidos.
Así, en las gradas se podrían emitir los mensajes que los seguidores de los equipos están publicando en Twitter, para crear una cierta sensación de comunidad. En el espacio, también se podrían añadir anuncios virtuales, que llenarían las gradas vacías de publicidad.
La idea de la publicidad virtual, añadimos, no es exactamente nueva. Es una de las cuestiones emergentes en publicidad deportiva. La publicidad virtual se ha estado usando hasta ahora en las vallas presentes en los estadios y en el propio campo deportivo, para ajustar los mensajes publicitarios a las audiencias del contenido.
Los espectadores en el campo están viendo unos anuncios, pero estos cambian para quienes lo ven desde casa. Así, por ejemplo, si la retransmisión es global se pueden ajustar los anuncios a los países de los espectadores y aumentar las posibilidades de rentabilizar espacios.