Por Redacción - 2 Diciembre 2013
Las redes sociales son los nuevos medios de comunicación masiva, la fuente de información de la que se nutren a diario millones de usuarios. Estos canales cuentan con una gran ventaja respecto a los medios tradicionales: permiten competir tanto a grandes como a pequeñas empresas en condiciones de igualdad.
Lejos de los presupuestos millonarios que se imponen en las cadenas de televisión o prensa escrita, las redes sociales poseen tarifas al alcance de todos los bolsillos. Un hecho que, desde el principio, ha permitido democratizar la publicidad en internet.
Esto ha provocado que el 72% de las pequeñas y medianas empresas recurra a los canales sociales para promocionar su negocio, según recogía a finales de noviembre BIA/Kelsey. Así, el El B2B Small Business Content Marketing indica que el 83% de las medianas y pequeñas está en LinkedIn, mientras que un 81% tiene cuenta en Twitter y el 80% en Facebook. en total, estas empresas están de media en 5 plataformas distintas.
El elevado poder de segmentación de los canales 2.0 permite ofrecer un mensaje específico a una audiencia determinada. Ello, unido a los bajos costes de inversión del medio online convierte a las redes sociales en el soporte ideal para desarrollar su estrategia de marketing. El artículo de Financial Times recoge que Facebook supone una gran oportunidad para las pymes. En él también se hace notar el incremento del 23% en su uso frente al año anterior.
Por su parte, 4,5 millones de pequeñas empresas ya utilizan Twitter para llegar a su público objetivo a través de su plataforma de microblogging, aunque no especifica cuántos de ellos contratan efectivamente campañas de publicidad en este medio.
Una estrategia que está resultando de lo más rentable. Basándonos en los datos BIA/Kelsey hemos podido saber que cerca de la mitad de las pequeñas y medianas empresas califica como excelente o extraordinario el ROI alcanzado a raíz de sus acciones publicitarias en las redes sociales.
Por su parte, Financial Times también recoge las declaraciones de Brian Wieser, analista de Pivotal Research, quien indica que la publicidad en Facebook por parte de los pequeños negocios está creciendo a muy buen ritmo; la promesa de poder llegar a una audiencia de 1.150 millones de usuarios resulta muy tentadora. Las cifras estimadas indican que, remedia, un pequeño anunciante podría invertir entre 1.000 y 2.000 dólares al año; una cifra que dista mucho de los 10.000 dólares que se destinan a Google, aunque se perfila como una opción con un gran potencial de crecimiento.
Las grandes redes sociales han vuelto sus ojos hacia los pequeños anunciantes. Su público objetivo incluye a los 20 millones de marcas con fanpages registradas. Por ello, están invirtiendo en las plataformas de gestión de anuncios que les permitan diseñar sus propias campañas y administrar sus presupuestos como deseen. Así, también han aumentado las posibilidades de promoción. Facebook recientemente ampliaba las posibilidades de segmentación para los pequeños anunciantes. Otra de sus novedades es la de permitir crear la campaña en función de un objetivo, simplificando asimismo el proceso de compra de los anuncios, o la de ayudar a elegir qué tipo de anuncio es el que funciona mejor.
De otro lado, Twitter acaba de abrir la veda a la publicidad para otros países fuera de Estados Unidos, como es el caso de Reino Unido, Canadá e Irlanda. Pinterest también se está abriendo camino en este área, y a finales de septiembre lanzaba sus pines patrocinados. Tan solo una semana después, Instagram se lanzaba a la conquista de las marcas a través de sus creativas imágenes con filtros.
Las posibilidades son infinitas, las redes sociales están al alcance de todos los presupuestos y permiten alcanzar al público objetivo de un modo personalizado. La clave está en diseñar acciones no intrusivas y saber cuándo y cómo actuar, con el fin de no interrumpir la experiencia de usuario, generando con ello rechazo hacia la marca.