Por Redacción - 21 Abril 2016
Puede parecer una suerte de truco del almendruco o algo que en realidad debería trabajarse más (o de forma diferente): contar con una especie de guía de las mejores horas para publicar contenidos en redes sociales es una de las cosas que los responsables de redes buscan desde hace más tiempo (solo hay que pensar en cuándo se vio por primera vez un artículo que prometía señalar la mejor hora para publicar en Twitter o en Facebook) y algo que no tiene tanto de ciencia exacta como se podría imaginar.
Lo cierto es que, antes de pasar a las generalidades, habría que tener en cuenta unos cuantos datos básicos y muy importantes. Cada marca es un mundo y cada estrategia es en realidad única y propia. Cada marca tiene que ser consciente de sus propias peculiaridades y cada una de ellas debe trabajar en esa área. Por mucho que los estudios digan una cosa, los responsables de marca tienen, antes que nada, que sentarse frente a los resultados que muestra su marca y analizar qué es lo que está sucediendo. Las mejores horas para publicar pueden variar en cada caso y pueden estar marcadas por ciertos elementos asociados a los propios fans o seguidores. Por ello, los responsables de redes sociales tienen que analizar su audiencia, sus pautas de comportamiento y el momento exacto en el que las cosas funcionan mejor en relación a sus seguidores. Herramientas como Google Analytics para analizar en tiempo real el tráfico social de referencia y las interacciones en nuestro sitio web, pueden ofrecernos información relevante de las respuestas de nuestros mensajes en redes sociales.
Una vez que se conozcan estos datos sobre la audiencia propia, es cuando se sabrá realmente cómo hacer las cosas para que funcionen. Los datos generales sobre cuáles son las mejores horas son, por tanto, una especie de guía, una señal para que el camino sea menos duro desde el principio y para encontrar un primer sendero que seguir al adentrarse en redes sociales. Son importantes, pero deben cruzarse con los datos propios de lo que ocurre realmente en el perfil de la empresa o marca en cuestión.
Cuando todo esto queda claro, se puede pasar a analizar esos datos generales y a extraer de ellos conclusiones. Como apuntan en un análisis de Hootsuite, en el que han analizado los tiempos que mejor funcionan en las principales redes sociales, no existen respuestas correctas y únicas, aunque sí un par de pistas sobre las cosas que mejor pueden funcionar.
Lo más importante a la hora de analizar el cuándo en lo que toca a publicar en Twitter está en ser consciente de la vida útil de los tuits: es muy corta. Según recuerdan, la mitad de su vida útil se va en 24 minutos, una cifra que es cuatro veces más corta que la de Facebook. Esto hace que las ventanas de oportunidad sean mucho más bajas y que haya que ser mucho más eficiente para encontrar el momento exacto en el que hay que publicar ese contenido.
¿Y cuál es la hora mágica? Cada maestrillo tiene su librillo, aunque las tardes parecen ser uno de los momentos en los que mejor funcionan los tuits, a tenor de lo que cuentan las diferentes fuentes que manejan en el análisis, quizás porque sus horas pico son aquellas en las que la gente parece estar saliendo de la oficina y por tanto entreteniéndose viendo lo que ocurre en Twitter. ¿Qué si no se va a hacer en el metro?, se podría decir. Las cinco de la tarde es un momento con muchos retuits para las fuentes que manejan en Hootsuite. Una frecuencia de entre 4 y un tuit por hora es también recomendable.
Para optimizar los resultados, recomiendan tener en cuenta datos de localización y también de automatización (hay herramientas que permiten publicar en el momento exacto en el que se tiene más potencial audiencia).
La vida útil de las actualizaciones en Facebook es más larga que en Twitter, lo que hace que la presión por escoger el momento exacto sea un poco menor. De hecho, según los datos de algunos estudios, los momentos de más intensidad en impresiones se producen (para el 75% de las actualizaciones) dos horas y media después de publicarlos. En realidad, lo que quita el sueño en lo que a Facebook se refiere es su algoritmo: a las marcas lo que les cuesta es hacer que el algoritmo que ordena el feed de noticias las tenga en cuenta.
¿Cuándo es el mejor momento?
El mejor es aquel en el que la audiencia está más activa y por tanto está en la red social. Y aquí cada audiencia parece ser independiente. Aunque el estudio de ver lo que hacen diferentes marcas parece mostrar que jueves y viernes entre la 1 y las 3 de la tarde son momentos con gran éxito en la recepción de los mensajes, lo cierto es que los demás datos son bastante variopintos. Cada marca tiene horas y días que funcionan mejor.
Algo similar sucede en Instagram: no hay horas mágicas para subir los contenidos y los responsables de marca tienen que pensar en qué hacen sus consumidores a lo largo del día para encontrar la ventana perfecta.