Las redes sociales han transformado por completo la forma en que las marcas se comunican con sus audiencias. Publicaciones en 3D, lenguajes a través de emojis, encuestas, stickers, memes y demás elementos que son tendencia en plataformas digitales y que al mismo tiempo tomadas como recursos para muchas estrategias de social media de grandes marcas en el mundo.
En redes sociales, se tiene la idea que, al comunicar, mientras más rápido y conciso se sea, mejor. Sin embargo, en los últimos cinco años, las historias han venido tomando fuerza en las plataformas sociales, llegando a convertirse en una tendencia relevante con excelentes resultados.
El storytelling; una práctica que suena interesante, pero que se percibe inviable en redes sociales. ¿Contar historias cuando las audiencias demandan inmediatez y simplicidad?
La narración de historias en plataformas sociales representa muchos retos para los creativos; comenzando por el estilo y contenido. ¿Cómo contar?, ¿Qué contar? Y por supuesto, ¿qué quiere mi audiencia leer?
Esta última interrogante, es el inicio de todo. Uno de los principales objetivos de las marcas que buscan ser relevantes, es lograr que sus contenidos sean virales, recordados, amados por las audiencias.
El branded content, esa práctica tan importante que busca conectar con los followers; demanda creatividad, perfección, pero también conocimiento de la audiencia con quien se va a conversar.
En este caso, la escucha social, se presenta como una gran aliada.
Para lograr contar una buena historia en redes sociales, es importante investigar y analizar. Y no me refiero a simples búsquedas de referencias en Google, me refiero a estudiar a la audiencia. El Social Listening va más allá de conocer la reputación de marcas en plataformas digitales, también es clave para conocer nuevas tendencias, temas de conversación e intereses.
Estar al tanto de lo que la audiencia consume en cuanto a contenido en redes sociales y conocer en profundidad de qué temas se interesan con regularidad, es primordial para ofrecer una historia que no solo los entretenga y atrape, sino que se apegue directamente a sus gustos. Personalizar es ganar.
Las palabras claves en torno a la conversación, son los datos importantes. Estos ítems aportan una idea clara de lo que la audiencia está hablando en redes sociales y podrían ayudar a relacionarlos con la marca.
Igualmente, en ese proceso de identificación de temas es importante constatar el sentimiento asociado a los tópicos, si se nota que las menciones, comentarios y publicaciones son positivas, negativas o neutras, esto ayuda a decantar y seleccionar los temas posibles para la historia.
En este caso, los temas de conversación bajo el sentimiento positivo posiblemente sean los más adecuados para tomar con referencia para crear una historia.
Cada sector es diferente. Hay marcas ligadas a campos de la sociedad donde las audiencias pueden ser exigentes, sensibles y contestatarias.
También, puede darse el caso donde la marca tenga buena reputación, pero el sector en el universo online esté mal valorado. Por ende, para evitar pasos en falsos, conocer bien este aspecto de la audiencia es indispensable.
Una vez que se ha evaluado a la audiencia en cuanto a consumo de contenido, conversación y sentimiento, es necesario identificar los horarios de mayor actividad de los seguidores en las redes sociales donde la marca tiene presencia, tomando en consideración que la historia vivirá en todas o una red seleccionada, es imperativo constatar los bloques de tiempo donde se genera más interacción.
Conocer este dato es vital si el objetivo es introducir la historia en momentos de conversación masiva de la audiencia.
Las audiencias en redes sociales son diversas y consumen contenido, privilegiando diferentes formas en cómo se les presenta.
Según un estudio de Husbspot, el 54% de los usuarios en redes sociales, prefieren ver contenido en video, relacionado con las marcas que siguen. No obstante, esto aunque es una tendencia común, no significa que aplica para todas las audiencias.
Una de las evaluaciones esenciales para optar por el formato indicado al momento de crear la historia es constatar qué tipo de contenido consume la audiencia: video, imagen, texto.
Una historia en redes sociales puede tener muchos objetivos: destacar un producto o servicio, atraer nuevas audiencias, incluirse en una conversación mundial (efemérides, días especiales), entre otras.
Definir la meta de la historia en las plataformas sociales es el último paso para comenzar a crear.
La narrativa en social media es un elemento diferenciador y que puede aportar frescura en todo el espectro de redes sociales. La abundancia informativa en estas plataformas puede manejarse desde diferentes focos, alineados a las audiencias y sus intereses.