Por Redacción - 8 Septiembre 2020
Una de las cuestiones que los marketeros tienen claro en social media marketing es la de que a los consumidores les gustan los contenidos creados por otros usuarios. Ayudan a crear la sensación de transparencia, parecen mucho más reales que los que crea directamente la marca y permiten comprender cómo son los productos. Los comentarios, las fotos y hasta los vídeos generados por los propios usuarios son muy valiosos y se ven como una guía determinante para comprender cómo son los productos.
Por ello, y a pesar del terror que en muchas ocasiones tienen los marketeros y los responsables de las empresas a los comentarios de los consumidores, las compañías han intentado potenciar que se hable de sus marcas y de sus productos en la red.
No solo invitan a hacerlo en servicios especializados en ello (¿quién no se ha cruzado con alguna petición a que dejes un comentario en una plataforma?) sino que además crean herramientas para crear conversaciones en redes sociales y conducirlas por los caminos que la marca favorece. Por ejemplo, es lo que ocurre con los hashtags de marca, omnipresentes en muchos elementos y en muchas acciones.
Pero ¿están los consumidores dispuestos realmente a seguir los caminos que la marca desea? Y, por muy valioso que sea de cara al social media marketing, ¿están abiertos a hacer ese trabajo ingente que la marca espera de ellos? Crear un vídeo de un producto no es algo que se haga, al fin y al cabo, en cinco segundos. Para las marcas, es muy rentable. Para los consumidores, es más complejo.
Como demuestra un estudio elaborado por Visual Objects y que recoge MarketingDive, los consumidores no están tan dispuestos como a las marcas les gustaría a esforzarse en generar ese contenido, por mucho que les guste leer las opiniones de otros y usarlas como referencia.
Así, el 75% de los encuestados reconoce que nunca ha usado un hashtag de marca publicando una actualización en redes sociales. No solo eso: en general, se podría decir que ignoran de forma bastante recurrente los hashtags de marca. Solo un 11% reconoce que en los últimos tres meses ha interactuado con al menos una campaña vinculada a un hashtag de marca.
Esto hace que los retos vinculados a hashtags de marca - algo que las marcas acaban usando en un momento o en otro - tengan poco sentido. Lograr que se produzca un engagement y que la gente realmente lo emplee es muy complicado, a menos que se dirijan a entusiastas de la marca o que la campaña esté vinculada a algún incentivo deseable.
No solo eso. A pesar de que el vídeo es el tipo de contenido de moda y que las marcas sueñan con consumidores que generen contenidos en vídeo sobre sus productos y servicios, estos están bastante poco por la labor de hacerlo. Un 73% reconoce que es poco probable que se pongan a crear vídeos de marca.
Frente a ello, otro tipo de formatos son más factibles, o logran al menos que algunos consumidores sí hagan cosas.
Un 40% de los consumidores publica Stories en Instagram o Facebook y un 27% asegura que ha conectado con livestreaming de marcas o usado sus filtros o herramientas de realidad aumentada. Un 26% asegura que es probable que dejasen una opinión sobre una marca, servicio o producto en un site de terceros.