Despierta, es hora de salir a la calle y abrazar al consumidor creando nuevos ambientes que le hagan sentir bien. Es tiempo para ser cercano, humano y más urbano, es el momento de conectar con el yo interior del consumidor, es el segundo perfecto para caminar de la mano del cliente a través del ambiente y propiciar la identificación con la marca. Ambient Marketing no es una intrusión a la intimidad del target objetivo, no es bombardear ni tejer telarañas con grandes lonas, es estrechar lazos con el consumidor integrándonos en su estilo de vida, es adaptarnos a su espacio respetando sus límites. Buscamos hacer protagonistas al target objetivo, de ser mas sociables y más integradores, es crear impactos visuales adaptando los elementos del mobiliario urbano, es dar un nuevo toque a lo tradicional y ofrecer un matiz diferente al ambiente. Ambient Marketing nace como la adaptación de lo cotidiano hacia algo más llamativo que capte y cautive al consumidor, no pretende empujar al cliente sino atraerlo, y provocar un impacto visual que atrape y enamore con una simple mirada. Se quiere buscar la complicidad con el consumidor y hacerlo sentir protagonista de la marca cada vez que nos vea andar junto a él. Debemos ser un aire nuevo para ellos, y darles un toque de color diferente a su vida. Porque este nuevo concepto de ambient marketing practica engagement y juega con branded content, para crear junto con insight publicitario y top of mind un ambiente hecho por y para el consumidor. Ya no se vive de spot, vallas y marquesinas agresivas, el cliente no se siente atraído por los continuos empujes y deseos de las marcas. Son las marcas las que viven y se desviven por los consumidores y sus suspiros, es por ello que el ambient marketing es una manera más de continuar caminando junto al cliente sin practicar la invasión e intrusión en sus vidas. Propicia nuevos ambientes, que provoquen una esfera emocional que atrape, cautive y haga sentir al consumidor que nuestra marca es más cercana y más humana. Porque sino humanizas en cada una de tus acciones de marketing, nunca estarás cerca de tu público, ni llegarás a conectar ni a propiciar lazos de familiaridad. Si practicas Ambient Marketing, estás practicando engagement ya que haces nacer un vínculo emocional, así como experiencias nunca antes vivida por el consumidor. No tengas miedo de salir a la calle para conquistar al consumidor, vamos, camina junto a él y cautívale. Llenar el ambiente de emociones y sentimientos, es llenar el corazón de tu cliente, es traspasar los límites de lo material para entrar en la espiritualidad. Es dar un paso más para derribar falsos mitos de que las marcas no saben enamorar. Una marca está hecha de sentimientos y de ellos deben nutrirse nuestros consumidores.