Un branding olfativo que evoque emocionalidad y conquiste el mapa emocional del consumidor
Un olor, un aroma embriagador de marca que haga perder la noción del tiempo y transporte a un estado de emocionalidad a la persona para hacerla navegar en un mar de sentimientos que desconecte el mapa racional para así adentrarse tanto en su alma como en su corazón. Es tiempo de conquistar a través del olfato para activar así los cincos sentidos y crear experiencias únicas e inolvidables, que otorguen un paso más hacia una biosfera que conquiste a la persona eternamente.
El marketing olfativo se apoya en el marketing de experiencias y reposa en el Top Of Mind para volverse perenne en el mapa emocional del consumidor. Sólo el recordar espontáneo permite vivir la marca desde el interior, sin interferencia alguna entre marca y persona. Lograr dichos momentos sólo es posible si la marca es capaz de sentir y borrar esquemas tradicionales basados únicamente en su beneficio privado e individual.
Crear un olor permite identificar a la marca, es practicar un branding olfativo y emocional que otorga un nuevo sentido al marketing de experiencias, no es suficiente con hacer vivir momentos únicos o experiencias inolvidables al consumidor, es la hora de caminar hacia el mapa emocional a través de un sentido tan napoleónico como es el olfato, un olor que activa primeramente el mapa racional del consumidor para poder transportarlo a un nuevo mundo donde la razón desaparece de tal manera que solamente existe la persona y los sentimientos que transmite la marca.
Practicar un marketing olfativo permite a la marca diferenciarse y ofrecer algo más que un simple producto vacío, es trazar rutas hacia el corazón del consumidor sin miedo a ser único. Un aroma es capaz de conquistar y conformar una lovemark cuyo objetivo es vivir dentro de la persona, y ser quien le ofrezca una experiencia única que lo atrape y envuelva día tras día. Dicho marketing se nutre de los sentimientos de los consumidores, y son éstos mismos los que moldean el olor para vivir experiencias únicas.
El marketing olfativo permite crear una seña de identidad de la marca, refuerza su imagen y le otorga un valor añadido de incalculable peso. Sentir una marca a través del olfato constituye una momento inigualable que permite activar los cincos sentidos que no se puede ni copiar ni imitar, ya que para los sentimientos no hay un link para activarlos se viven practicando la socialización y humanización.
Para vivir experiencias con aroma de branding es aconsejable practicar un marketing olfativo que se nutre del marketing de experiencias y de la conexión con el mapa emocional de la persona.