Por Redacción - 21 Diciembre 2022
A lo largo de este año se ha ido dando a conocer la segunda edición de la Guía Salarial Adecco del Mercado Laboral especializada por sectores, un completo análisis de las remuneraciones en España en el último año, centrándose en posiciones esenciales cuya banda salarial se sitúa por debajo de los 40.000 euros brutos anuales de media.
A pesar de las dificultades que ha tenido que sortear este último año la industria española de Alimentación y bebidas (incremento de la inflación, costes energéticos y conflictos en el transporte), se mantiene como la primera industria manufacturera del país y uno de los principales exportadores de nuestra economía. Uno de cada cinco trabajadores del ámbito industrial desarrolla su labor dentro del sector de la alimentación.
La progresiva reactivación del ocio, así como de la hostelería y el gasto asociado al turismo, han conseguido acelerar de nuevo la producción alimentaria durante el último año, volviendo a la trayectoria positiva que había mantenido el sector el lustro anterior en términos de creación de empleo y de facturación. Casi medio millón de personas trabajan en la industria de alimentación y bebidas, lo que supone un 2,6% del empleo total en España. La proporción de mujeres ocupadas en el sector (4 de cada 10 trabajadores) es más elevada que la media del conjunto de la industria manufacturera. En cuanto a la distribución por edades, más de la mitad, un 50,8%, cuentan con edades intermedias, entre 25 y 44 años, el 44,4% se sitúa en el segmento de más de 45 años y solo un 4,8% del empleo se localiza en el segmento más joven (16-24 años).
El sector alimentario se encuentra en un momento de transformación, con profundos cambios en sus modelos de negocio y en las estructuras de las empresas como resultado de su necesaria digitalización. Uno de los retos a los que se enfrenta es la falta de personal formado para los puestos especializados que necesita cubrir. Tradicionalmente, para la cobertura de posiciones laborales básicas los requerimientos de entrada eran mínimos, pero la progresiva automatización de sus procesos ha llevado a las empresas alimentarias a exigir una cualificación mínima de Formación Profesional como nivel de acceso.
Por otro lado, en el último año ha aumentado en cuatro décimas la proporción de trabajadores/as mayores de 55 años. Este progresivo envejecimiento de las plantillas hace también urgente la necesidad de encontrar reemplazos para los trabajadores/as que vayan jubilándose.
A nivel salarial, la tendencia general en el sector durante el último año ha sido la estabilidad. Más de dos tercios de las empresas no han realizado grandes cambios respecto al ejercicio anterior en sus políticas retributivas. Tan solo se han incrementado los sueldos de algunos perfiles como el Jefe/a de Turno, el Preparador/a de Pedidos, el Técnico/a de Mantenimiento o el Gestor/a de punto de venta, cuya demanda también ha crecido en los últimos meses.
La industria de la alimentación y bebidas continúa inmersa en un proceso pleno de digitalización y adopción de nuevas tecnologías. Las empresas están realizando importantes inversiones, no solo en la robotización de procesos para incrementar la producción sino también en tecnologías de big data, con las que realizar estimaciones más precisas de nuevas tendencias, así como en cloud computing para reformar la seguridad de sus instalaciones.
Desde un punto de vista más comercial, son muchos los fabricantes que han dado el salto al e-commerce, reforzando sus canales digitales. También se espera que en distribución se produzca un incremento de las alianzas entre empresas.
Este perfil es el mejor retribuido de todos los analizados para el sector, con un sueldo medio que se sitúa en torno a los 35.630 euros brutos anuales. Hay varias regiones que retribuyen a estos profesionales con salarios por encima de los 40.000 euros, llegando a ofrecer hasta 60.000 euros anuales: Andalucía, Cataluña, la Comunidad de Madrid y el País Vasco.
Es la persona que se encarga de diseñar la estrategia de crecimiento de la empresa en términos de marketing digital. Coordina con otros departamentos de la empresa las estrategias digitales a llevar a cabo en los diferentes canales corporativos.
La mayoría de las empresas que buscan candidatos/as para cubrir este perfil demanda que el Responsable de Marketing Digital haya cursado una titulación universitaria en la rama de Ciencias Sociales y Jurídicas.